Las lluvias, que continúan cayendo en todo Antioquia, siguen generando emergencias y la subregión del Bajo Cauca antioqueño es uno de las más afectadas del departamento, principalmente en Caucasia, donde el desbordamiento del río Cauca tiene siete veredas y ocho corregimientos afectados. También hubo emergencias en Nechí y Cáceres.
Una de las situaciones más críticas se registró en el corregimiento Palomar, ubicado a una hora por carretera destapada del casco urbano de Caucasia (46,2 kilómetros). Allí, la salida del afluente tiene a las comunidades con el agua hasta la cintura y los líderes del sector piden una reubicación.
Otra de las comunidades inundadas fue la del corregimiento Margento, ubicado a 50 minutos de la zona urbana (49 kilómetros), donde el agua afectó a gran parte de la comunidad, razón por la que las autoridades tomaron la determinación de no dictar clases en la institución educativa del sector.
El río también se desbordó en una de las fincas del municipio de Nechí, donde el agua afectó a decenas de hectáreas, provocando pérdidas millonarias de cultivos, mientras que en Cáceres 359 familias resultaron damnificadas por las inundaciones.
El agua, además, provocó un deslizamiento en la vía que comunica a Yarumal con Campamento, que causó el cierre de la vía y obligó a la reubicación de las familias aledañas al sitio del derrumbe.