La investigación fue realizada por los profesores Mara Faccio y John J. McConnell de la Universidad Purdue en Indiana, Estado Unidos.
Los académicos analizaron los accidentes de tránsito ocurridos en el condado de Tippecanoe, en Indiana, desde que comenzó a funcionar el juego Pokémon GO, 6 de julio de 2016 hasta el 30 de Noviembre del mismo año.
La idea de los investigadores era encontrar si los jugadores lo hacían al conducir, lo que aumentaría la probabilidad de accidentes en lugares cercanos a PokéStops. “Se debería experimentar un aumento desproporcionado en los choques después de la introducción del juego”, dijeron los investigadores.
¿Qué encontraron?
Al analizar el aumento en el número de accidentes en ubicaciones próximas a los PokéStops se concluye que desde la creación de este juego el incremento de accidentalidad en estos puntos es del 47 % y con un 25 % de aumento en lesiones personales.
Al extrapolar los datos a todo el país, concluyeron que en cinco meses, Pokémon Go podría haber sido responsable de más de 140 mil accidentes de tránsito, que dejaron cerca de 30 mil heridos y 256 muertos.
Lo que concluye el estudio es que estos datos pueden ayudar a las autoridades a la hora de dar prohibiciones adicionales sobre el uso de celulares al conducir.
Y para los dueños del juego que se realice un bloqueo si se identifica que el usuario está manejando.
“En una actualización del juego, Niantic agregó un mensaje emergente que decía “¡Vas demasiado rápido! Pokémon Go no debería jugarse mientras conduces”, dicen desde la investigación y añaden que se requiere más regulación.