“Lo primero que hay que resaltar es que en Colombia existen tres tipos de modalidades de Teletrabajo, todas amparadas bajo la ley 1221 de 2008 que responden a los espacios de ejecución del trabajo, las tareas a ejecutar y el perfil del trabajador. Estas son: Autónomo, Suplementario y Móvil. El Teletrabajo autónomo: se refiere a los trabajadores independientes que se valen de las TIC para el desarrollo de sus tareas, ejecutándolas desde cualquier lugar elegido por ellos; en este sentido, las funciones se cumplen con el apoyo de las tecnologías desde cualquier sitio. El Teletrabajo suplementario: se trata de los trabajadores con contrato laboral que alternan sus tareas en distintos días de la semana entre la empresa y un lugar fuera de ella usando las TIC para dar cumplimiento. Se entiende que teletrabajan al menos dos días a la semana. El Teletrabajo móvil: en este caso los trabajadores utilizan dispositivos móviles para ejecutar sus tareas. Su actividad laboral les permite ausentarse con frecuencia de la oficina. No tienen un lugar definido para ejecutar sus roles.
Son tres fases que se deben tener para lograr una implementación exitosa: planificación, ejecución, evaluación, seguimiento y acompañamiento. Es importante que siempre existan acuerdos directos entre el teletrabajador y el empleador, para que sientan que el proceso tiene un acompañamiento continuo”.
