Estas encuestas terminan manipulando el voto, efectivamente, sobre todo el voto de opinión, no tanto el de las estructuras. Recordemos la primera encuesta de YanHaas, que se hizo en la semana siguiente a la consulta (11 de marzo de 2018), en la que ni Vargas Lleras ni Fajardo ni De la Calle habían podido hacer ningún tipo de publicidad, eso no daba ningún equilibrio en la encuesta. El 11 de marzo, Cambio Radical sacó 2.200.000 votos, 14 % de la votación, pero en la encuesta sale que solo el 3 % es de Cambio Radical, ¿qué credibilidad puede tener? Otra incongruencia: si Germán Vargas tiene el 6 % de intención de voto, serían más o menos 1.200.000 votos. Yo le hago una propuesta al director de YanHass: si Vargas Lleras saca menos de 1.600.000 votos, yo me retiro de la política. Si saca más votos, más del 6 %, que él cierre la encuestadora.
Porque esto no puede seguir así. Los candidatos hacen un gran esfuerzo, y los encuestadores acaban con todo un proceso de democracia. Lo que hacen es despertar pasiones, y no invitar al voto reflexivo.
Es muy raro que en todas las encuestas todos los candidatos tengan porcentajes similares, salvo Germán Vargas. Sin embargo, estamos absolutamente seguros de que con él vamos a pasar a segunda vuelta, que no tenga nadie la menor duda.