Este año industria nacional fabricará 47 millones de pares de zapatos, cifra menor a los 50 millones del año pasado. Sector del cuero genera medio millón de empleos.
Las cifras de producción de las actividades industriales del cuero, el calzado y sus manufacturas en lo corrido de este año observan un desempeño negativo, según el Dane.
En estos sectores se contabilizan más 7.668 empresas formales, 733 de ellas localizadas en Antioquia, las cuales generan unos 500.000 empleos directos e indirectos.
De acuerdo con el Dane, entre enero y mayo la fabricación de calzado cayó 4,2%, la de productos de marroquinería se contrajo 6,4% y el curtido de cueros se desplomó 7,4%.
Desde la Asociación Colombiana de Industriales del Calzado, el Cuero y sus Manufacturas (Acicam), en lo corrido del año, se observa una merma en los pedidos de calzado para dotación e incluso en la producción de botas pantaneras, pues el fenómeno de El Niño redujo la fabricación y ventas de este tipo artículos.
“Además, las ventas a los distribuidores nacionales se complicaron porque ellos sintieron que sus inventarios estaban altos, por lo que estuvieron a la espera de poder rotar ese stock”, comentó William Parrado, vicepresidente de Acicam.
El año pasado la industria colombiana fabricó 50 millones de pares de zapatos, pero este 2024 la cifra bajaría a 47 millones.
En cuanto a las exportaciones de calzado (incluido partes como taloneras, plantillas, entre otros) los números del Dane evidencian un aumento de 6,5%, pero los análisis de Acicam enfocados solo en los despachos de calzado terminado muestran un incremento que puede ser del 11,4%, impulsado por los negocios con compradores de calzado de cuero y botas en Estados Unidos y Costa Rica.
Adicionalmente, se resaltan las exportaciones a Ecuador, Panamá, Perú y Guatemala. Al mercado venezolano, en lo que va de este año, se ha enviado calzado por US$349.000, cifra que está en ascenso leve desde 2020, pero no al ritmo que los empresarios esperan, dados los fenómenos inflacionarios en el vecino país y la falta de garantías para los pagos a los productores colombianos.
Aunque la mayoría de esa ventas las hacen grandes empresas, es notorio el avance de algunas micro, medianas y pequeñas empresas (mipymes) que ya están llegando con calzado a Perú y República Dominicana.
“El mercado del Caribe ha sido muy atractivo y muchas empresas están revisando varios países, entre ellas las mipymes que están vendiendo calzado sintético y de cuero”, mencionó Parrado.
En contraste, las exportaciones de cueros curtidos y sin curtir están a la baja desde el año anterior, pues los envíos de esa material fresco a Nigeria dejaron de hacerse. También las ventas externas del llamado wet blue o cuero azul (curtido con cromo) que se despacha a China e Italia muestran una reducción.
El desempeño desfavorable de ese tipo de exportaciones beneficia con una mayor oferta a la industria local del cuero, aunque los precios del material se mantienen altos toda vez que los insumos para su procesamiento (cromo, ácido sulfúrico, quebracho), que son importados, están costosos por efecto de la dinámica de tasa de cambio del dólar, en lo que va del año.
Lo que llega del exterior
A mayo las importaciones de calzado crecieron 12,3%, pasando de US$163,9 millones en los primeros cinco meses de 2023 a US$184,1 millones en el mismo periodo de este año.
Acicam, por su parte, contabilizó el ingreso de 9,3 millones de pares de zapatos entre enero y marzo de 2023, pero ese número bajó a 8,5 millones de pares en el primer trimestre de este año.
“Lo que se ve es un aumento en la cifra en dólares, pero una disminución en el número de pares porque las prendas están llegando con valores más altos. Y lo que sí se sigue viendo son temas de subfacturación, por lo que estamos pidiéndole al gobierno que revise los umbrales arancelarios, que no se han modificado en los últimos 5 años”, precisó el dirigente gremial.
En ese contexto, para importaciones de calzado de cuero existe un tope de US$10, para países con los que Colombia no tiene acuerdos comerciales. Para lo que se declara por encima de ese monto, el arancel es de 15%; y lo que se declare a US$10 o menos paga 35%.
Para el calzado de material sintético el umbral es de US$6, pero para los empresarios colombianos esos topes están propiciando la subfacturación, por lo que resulta fundamental que sean revisados por parte del Ministerio de Comercio, entidad con la que Acicam intenta reunirse para plantearle esta inquietud.
La semana anterior Acicam celebró en Corferias, Bogotá, su feria IFLS+EICI en la que participaron 415 expositores, 390 nacionales y 25 internacionales. El gremio destacó la vinculación de diversas instituciones como las alcaldías de Bucaramanga, Floridablanca y Cúcuta, y la Cámara de Comercio de Pasto. Se destacaron las misiones de empresarios de Brasil, así como de México que participaron con muestras de insumos. “Apreciamos un clima de reactivación y mejores ventas. Los empresarios asistentes se declararon satisfechos por el nivel de pedidos que recibieron”, manifestó William Parrado, vicepresidente ejecutivo de Acicam, quien confió en un mejor desempeño del sector durante el segundo semestre de este 2024.
