Las sanciones de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) a 8 marcas de leche, entre ellas que compran las Tiendas D1, generaron debate sobre sus productos, ya que vendían productos como la leche cuando en realidad era lactosuero, un subproducto del proceso de elaboración de quesos.
Recientemente se conoció que usuarios estarían reportando “una nueva medida” por parte de las Tiendas D1 para informar asertivamente sobre la composición del producto lácteo que la gente en estos supermercados compra como leche. Se trataría de una etiqueta con el mensaje “Este producto no es leche, su composición y calidad nutricional difieren de las propiedades de la leche”.
Sin embargo, la compañía compartió un comunicado oficial a raíz de esta coyuntura donde expresan que la etiqueta “ha estado presente en nuestras tiendas desde hace años y no es una nueva medida ni está relacionada con recientes decisiones de la empresa”.
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¿Por qué sancionó la SIC a las marcas de leche que adquieren las Tiendas D1?
La SIC impuso recientemente multas que superan los 21.000 millones de pesos a cuatro empresas lecheras: Gloria, Lactalis, Hacienda San Mateo y Sabanalac. Estas compañías fueron sancionadas por presentar como leche entera sus productos que contenían lactosuero, un subproducto del proceso de elaboración de quesos. Esta práctica, prohibida en Colombia desde 2006, induce a error a los consumidores sobre la verdadera naturaleza y calidad del producto que adquieren.
La respuesta de Tiendas D1: advertencias en sus productos
En el comunicado oficial también expresaron que la compañía D1 no es productora de leche. “Compramos leche y vendemos leche. Nuestros acuerdos de compra con fabricantes incluyen la obligación expresa de cumplimiento con la reglamentación técnica vigente para el producto y la compra de leche cruda nacional a precios justos definidos según el sistema de pagos establecido por el Gobierno nacional”, escribieron.
También se refirieron a su estricto programa de control y gestión de calidad para sus proveedores, “el cual incluye auditorías internas y externas a las plantas de producción, así como análisis continuos realizados por laboratorios acreditados”.
De esta manera, las Tiendas D1 aseguran que el etiquetado no es nuevo ni está relacionado con la polémica de la leche entera y el lactosuero en el país, que mezclan algunas compañías para “hacer rendir más a leche”. Esta problemática encendió la alarma nacional ya que muchos clientes de diferentes supermercados han consumido lactosuero pensando que era “leche”, entre ellos varias generaciones de niños que solo han consumido este producto para su crecimiento.
La compañía también se refirió a los precios de la leche que ellos adquieren frente a otras marcas del mercado. “Son fruto del esfuerzo de D1 por optimizar todos los procesos y acercar cada vez más a los productores con los consumidores finales, reduciendo al máximo la intermediación y sus costos, priorizando la democratización del consumo y la construcción de país a través del apoyo al agro colombiano y la cadena productiva del sector lácteo”, finalizaron.
A pesar de la presencia de esta etiqueta, algunos usuarios de D1 con fecha al 7 de marzo aseguran que estos productos no cuentan con la aclaración de que son lactosuero, y no leche entera. No se sabe si la media es ampliamente usada en todas las tiendas D1 a nivel nacional.
La Superintendencia también impuso sanciones a tres de estas empresas: Gloria, Lactalis y Hacienda San Mateo, por infracción de las disposiciones que regulan el sector, al haber obtenido una ventaja competitiva significativa como resultado de la violación de las normas que prohíben la adición de lactosuero a la leche en cualquier etapa de la cadena de producción.
“Con la adición de lactosueros estas sociedades tuvieron la posibilidad de vender al mismo precio que sus competidores, ampliando con ello su margen de utilidad, o vendiendo el producto a un precio menor, aprovechándose de la venta en volumen, y afectando a los competidores que respetaron las normas”, indicó la autoridad. En otras palabras, para que el producto “rindiera más”.
En cuanto los elementos probatorios que soportan la decisión, la Superintendencia encontró que los sancionados adicionaron lactosuero a la leche, con base en los resultados de las pruebas del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), obtenidas en el marco de visitas administrativas de inspección realizadas con la Delegatura para la Protección de la Competencia en el año 2020.
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