¿Cuánto debe recortar el Gobierno?
El debate sobre el ajuste fiscal es candente. Expertos calculan que el recorte necesario oscila entre $20 billones y $30 billones, una cifra que impactaría drásticamente la inversión pública y podría frenar el crecimiento económico.
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Sin embargo, la otra cara de la moneda es que sin estos recortes, el déficit fiscal podría desbordarse, agravando la ya delicada situación de la deuda pública.
José Antonio Ocampo, exministro de Hacienda del mismo gobierno, fue enfático en señalar que la renuncia de Guevara fue una decisión equivocada.
A través de su cuenta en X, expresó su preocupación por el futuro fiscal del país, destacando que “el nuevo Ministro tendrá la tarea de reducir el déficit fiscal, con recortes de gastos y control a la evasión tributaria”.
¿Podrá Germán Ávila frenar el deterioro fiscal?
Germán Ávila asumirá esta semana la cartera de Hacienda, convirtiéndose en el cuarto ministro en este puesto en menos de cuatro años, algo que no ocurría desde hace décadas.
Su principal desafío será enviar señales de estabilidad a los mercados y tomar decisiones que frenen el creciente déficit fiscal, que, según Ocampo, podría llevar la deuda pública a niveles históricos.
El exministro también advirtió sobre la posibilidad de que el país pierda su grado de inversión en Moody’s, la única calificadora que aún mantiene a Colombia en ese estatus.
El reto del nuevo ministro: decirle ‘no’ a Petro
En su análisis, Ocampo subrayó que un buen Ministro de Hacienda debe tener la capacidad de contradecir al presidente cuando sea necesario.
“Los costos en materia de intereses de la deuda pública podrían ser muy altos. Esa tarea exige decirle no al Presidente cuando sea necesario”, dijo
Pero más allá de la independencia que pueda tener Ávila, lo cierto es que enfrenta un panorama complejo. El déficit fiscal de este año puede estar muy por encima del estimado por la cartera de Hacienda, lo que significa que su margen de maniobra para evitar que el próximo gobierno herede la deuda pública más alta de la historia reciente es limitado.
Ocampo insistió en que el nuevo ministro de Hacienda debía ser capaz de tomar decisiones difíciles y, lo más importante, demostrar que tenía la independencia y la firmeza necesarias para decirle “no” al presidente Petro cuando fuera necesario.
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De acuerdo con Ocampo, el déficit de 2024 ya se ubica en 6,1 % del PIB, con una proyección de que en 2025 y 2026 podría alcanzar hasta el 8 %, muy por encima del 5,1 % inicialmente programado. Esto obligará al nuevo ministro a tomar decisiones inmediatas en materia de aplazamientos de pagos y reducción del gasto público.
Asimismo, el exministro advirtió que si el Gobierno no toma medidas drásticas, Colombia podría perder el acceso a la Línea de Crédito Flexible del Fondo Monetario Internacional, un mecanismo exclusivo para países con buen manejo económico.
Por otro lado, el nuevo ministro deberá garantizar que los recortes no afecten sectores estratégicos como la infraestructura y la salud. Ocampo fue claro en que las obras en curso, como el Metro de Bogotá, y las vigencias futuras de inversiones privadas en infraestructura no pueden verse comprometidas.
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