La vieja disputa comercial entre Estados Unidos y la Unión Europea revivió con fuerza.
Este lunes se conoció que la Comisión Europea, el brazo ejecutivo del bloque, propone imponer aranceles del 25 % a una serie de productos estadounidenses, en represalia por la reciente decisión de Donald Trump de gravar las importaciones de acero y aluminio.
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Se trata de un documento oficial visto por Bloomberg que detalla docenas de categorías de bienes que estarían en la mira del ajuste arancelario europeo.
La movida aún debe ser aprobada esta semana por los Estados miembros, pero la idea es que entre en vigor el 15 de abril. Eso sí, la mayoría de los cobros reales arrancarían a mediados de mayo, si no hay una solución política antes.
La historia se repite, desde 2018
Este nuevo capítulo recuerda los roces comerciales que estallaron en 2018, cuando Trump, en su primer mandato, impuso aranceles al acero y al aluminio importados de la UE, alegando motivos de seguridad nacional.
Bruselas respondió con aranceles espejo del 25 %, que afectaron desde whisky americano hasta motocicletas Harley-Davidson.
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Esa primera ronda de guerra comercial se suavizó en 2021 bajo el mandato de Joe Biden, quien acordó suspender los aranceles para reiniciar las conversaciones. Gracias a ello, por ejemplo, el whisky estadounidense volvió a entrar sin sobrecostos a Europa.
Pero la tregua se rompió. Con Trump nuevamente al frente del Gobierno y sus políticas proteccionistas recargadas, Europa ya no quiere esperar sentada.
¿Qué productos pagarán más aranceles?
Aunque el listado completo aún no es público, fuentes de la Comisión señalan que se gravarán miles de millones de euros en productos, en sectores estratégicos para Estados Unidos.
Es una respuesta calibrada: los europeos buscan mostrar determinación sin cerrar la puerta a la negociación.
Ministros de Comercio de los 27 países del bloque se reunieron en Luxemburgo para coordinar una estrategia. La consigna es clara: responder con firmeza, pero con cabeza fría, buscando forzar una salida diplomática sin debilitar su posición.
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En palabras simples: presionar sin romper. La propuesta de aranceles del 25 % es una señal a Washington de que Europa no se quedará cruzada de brazos, pero también un intento de equilibrar la cancha mientras se sigue negociando.
”Queremos dejar margen para una negociación, pero también mostrar que estamos listos para defender nuestros intereses”, fue el mensaje que filtraron funcionarios europeos a medios como Reuters.
Por ahora, la pelota está en la cancha de Trump, quien además ha endurecido su discurso no solo contra Europa, sino también contra China y Japón, dejando claro que su nuevo mandato será de mano dura en comercio exterior.
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