Una de las apuestas fuertes en el inicio del Gobierno de Iván Duque, por lo menos desde el discurso, era la economía naranja. Así lo dejó ver el jefe de estado desde la campaña previa a su elección en 2018, siendo el impulso a este sector una de sus cartas para llegar a la presidencia.
Justamente, haciéndole seguimiento a esta industria el viernes pasado el Dane presentó el tercer reporte de economía naranja en el que reveló que en abril el empleo del sector cayó 34,7 % (ver Para Saber más).
Además, de acuerdo con la entidad estadística, mientras en 2018 este renglón de la economía empleó a 539.607 personas, y en 2019 a 581.117, en los cuatro primeros meses de este año se reportaron 379.745 ocupados, lo que muestra el golpe de la pandemia sobre esta industria.
“Claramente sectores como las artes escénicas y el turismo se han visto muy afectados en medio de la cuarentena y se han perdido muchos puestos de trabajo en parte por su alta informalidad”, analiza Juan Pablo Ortega, gerente de Negocios Estratégicos de Conectri.
Para el experto, pese a que la coyuntura ha impactado a todos los jugadores de la economía naranja, hay grandes oportunidades para quienes se desempeñan en artes visuales, publicidad, diseño, desarrollo de software y servicios de tecnologías de información, en tanto que pueden ser partícipes en la aceleración de la transformación digital y la reactivación del país.