En un entorno en el que las empresas tienen cada vez más conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad, los bonos verdes se han consolidado como una alternativa de financiación. En 2016 se superaron los 102.300 millones de dólares en emisiones en todo el mundo, el doble de los 51.200 millones de 2015. En 2017, el volumen de emisiones de bonos verdes alcanzó los 173.400 millones de dólares y el año pasado cerró en 182.200 millones de dólares, según Bloomberg New Energy Finance (NEF).
A nivel local, al cierre de 2018, se habían emitido a través de la Bolsa de Valores de Colombia (BVC) cuatro bonos verdes que suman 384 millones de dólares (1,2 billones de pesos), los cuales han logrado un apetito que ha sido 79,6 % mayor que el total adjudicado.
Bancóldex, el banco público de segundo nivel que promueve el desarrollo empresarial, anunció la semana pasada el lanzamiento de una nueva línea de crédito por 100.000 millones de pesos para impulsar la inversión en proyectos de desarrollo sostenible y eficiencia energética y energía renovable.
“Serán financiables las inversiones incluidas en proyectos de disminución en el uso de recursos no renovables, reducción o aprovechamiento de residuos líquidos, sólidos o emisiones atmosféricas, el mejoramiento de la calidad atmosférica”, dice la Circular sobre la línea de desarrollo sostenible y eficiencia energética 2019.
Adicionalmente, se financiará la optimización del consumo de energía eléctrica o térmica, la implementación de proyectos de uso eficiente de la energía como por ejemplo: iluminación LED, motores de alta eficiencia, refrigeración, acondicionamiento de aire, generación de vapor (calderas), sistemas de medición y control de energéticos, optimización de procesos de combustión, recuperación de calor residual, cogeneración de energía y vehículos híbridos o eléctricos.
También son financiables proyectos de generación de energía eléctrica o térmica a partir de fuentes renovables de energía como biomasa, energía solar, eólica, entre otras.
“La eficiencia energética es una condición necesaria para mejorar la productividad y competitividad del país, por ello desde Bancóldex, trabajamos con el compromiso de crear mecanismos financieros para que los empresarios puedan incrementar su productividad y mitigar el impacto ambiental de su actividad económica, con estos recursos que hoy ponemos a disposición” añadió Javier Díaz Fajardo, presidente de la entidad.