La economía colombiana volvió a dar señales de vida en febrero. Según el más reciente Indicador de Seguimiento a la Economía (ISE), publicado por el Dane, el país registró un crecimiento del 1,77% en comparación con el mismo mes de 2024, que se ubicó en 118,59 puntos frente a los 116,53 de un año atrás.
Cuando se ajusta el dato por calendario y estacionalidad, el crecimiento fue aún mayor: 2,96%, con un ISE que alcanzó los 125,46 puntos, frente a los 121,86 del mismo mes del año pasado.
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En la medición mensual, es decir, respecto a enero de este año, el crecimiento fue más moderado: apenas 0,25%.
Sobre estos datos, César Pabón, director ejecutivo de Investigaciones Económicas de Corficolombiana, precisó que el ISE creció 3% en febrero (ajustado por calendario), mostrando un buen arranque de año.
“La serie original subió 1,7%, pero ojo: 2024 tuvo un día hábil más por ser bisiesto, así que la comparación válida es la ajustada”.
Año corrido: primer bimestre con crecimiento leve, pero constante
En el acumulado de enero y febrero de 2025, la economía creció 2,17 % frente al mismo periodo de 2024.
Aunque es un avance modesto, representa una mejora frente al crecimiento de 2,07% que se había registrado en el mismo bimestre del año pasado. La tendencia es lenta, pero positiva, aseguran los analistas.
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La estrella del crecimiento económico volvió a ser el sector terciario, que agrupa servicios como comercio, transporte, salud, educación, entretenimiento y administración pública.
En febrero, este sector creció 3,54% en la serie original y 4,36% en la ajustada, frente al mismo mes del año anterior. En la comparación mensual, también creció: 0,45% más que en enero de este año.
En contraste, las actividades secundarias —es decir, la industria y la construcción— siguen mostrando señales de desgaste.
En febrero de 2025, la serie original del índice cayó 3,12% frente a 2024, y en la serie ajustada la contracción fue de 1,49%. Mes contra mes, el retroceso fue de 0,65%, lo que refleja un enfriamiento productivo sostenido.
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El sector agropecuario, por su parte, se mantuvo en una suerte de limbo. En la serie original, cayó 0,96% anual, pero si se ajusta por estacionalidad, mostró un leve repunte de 0,79%. En la comparación mensual, creció 0,88 % frente a enero.
Aunque el crecimiento general es positivo y el sector servicios sigue empujando, la desaceleración en la industria y el débil comportamiento del agro son señales que no se pueden ignorar. El repunte de febrero podría dar algo de oxígeno a las proyecciones del PIB trimestral.
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