El alto precio del oro tiene haciendo cuentas al sector extractivo, a los gobiernos y a los inversores. Y no es para menos si se tiene en cuenta que el metal precioso superó su precio máximo histórico dado a las perspectivas de recortes de tasas de la Reserva Federal (FED) y la incertidumbre económica en Estados Unidos.
Aquí hay que tener en cuenta que Colombia es un país que cuenta con proyectos de explotación de oro y, por tanto, llevará su tajada ante esta coyuntura.
En la tarde del martes, el precio de la onza de oro aumentó 1,27% hasta los 2.141,79 dólares. Esto fue superior a su máximo que ya había alcanzado en diciembre, cuando llegó a los 2.135,39 dólares por onza.
Lo sorprendente es que hoy, el precio seguía arriba y ya acumulaba ocho jornadas con curva ascendente en el mercado bursátil de EE. UU. Este jueves, la cotización alcanzó los US$2.171que son $8,5 millones colombianos al cambio de hoy.
Para entender el mercado del oro, hay que saber que este mineral se considera un valor de refugio. Eso quiere decir que en momentos de crisis financieras mundiales aumenta considerablemente su precio.
Por esa razón, las preocupaciones sobre las perspectivas económicas mundiales y las recientes tensiones geopolíticas contribuyen a crear incertidumbre, la cual no le cae nada bien a los inversores que buscan conservar al máximo el precio de su capital.
Lea también: El oro alcanza su precio máximo histórico
El beneficio
Lo cierto es que la situación beneficia a los países que cuentan en su suelo con el codiciado metal. Uno de ellos es Colombia, que de acuerdo con el Ministerio de Minas y Energía, exportó en 2023 cerca de 58.177 kilos, equivalentes a 2.767 millones de dólares.
¿Cómo beneficiaría a este país el alto precio?, Carlos Medina, gerente del Banco de la República de Medellín, resumió el beneficio en “mayores divisas para el país y más apetito en la explotación del mineral”.
El gerente sostuvo que los altos precios no son de ahora y que desde hace varios años se viene registrando un valor considerable del oro en el mercado, lo que se ha traducido en la consolidación de varios proyectos mineros en Colombia, como los que actualmente se aprecian en Santander, Antioquia y Caldas.
Entonces, es claro que el elevado precio motivará más la chequera de los inversores, por lo que es posible que más inversionistas se interesen en el mercado de oro en este país.
Para Luis Fernando Barrera Martínez, presidente de la Asociación de Profesionales del Sector Minero Colombiano (APMC), habrá varios bolsillos beneficiados. Y seguramente será así, ya que un buen precio se traduce en mayores ingresos, lo que quiere decir que la caja registradora de los comerciantes será alimentada con mayores ganancias y eso también contribuirá a mayores ingresos por exportaciones para Colombia.
“Otra ventaja son los ingresos fiscales. Casi nadie le pone atención y es un tema muy importante porque resulta que las empresas mineras estas sujetas a unos impuestos y regalías. Eso quiere decir que un precio alto del oro le brinda mayores recaudos al Gobierno”, explicó el líder gremial.
Para tener un panorama, según datos del Ministerio de Minas y Energía, las regalías por oro le dejaron a Colombia 65,2 millones de dólares en 2022.
Otra ventaja responde al que el alto precio estimula la exploración. Claramente, si se está obteniendo una ganancia más gruesa al vender el mineral, pues las compañías extractivistas van a querer tener más.
Esto sin contar que las reservas de oro nacionales se valorizarán. Sin embargo, el gerente de Banrep en Medellín indicó que las posesiones de Colombia en oro no son tan importantes y estima que el impacto en ese sentido sea muy mínimo.
Lea también: Gremios mineros advierten que el nuevo decreto de las reservas naturales temporales afectará la legalidad
Llamado de atención
Más allá de la buena coyuntura para los mercaderes y empresas mineras, hay una realidad y es que cerca del 86% del oro que se explota y se comercializa en Colombia proviene de la minería ilegal.
El dato es de un estudio de la Defensoría del Pueblo y la Universidad del Rosario. El documento sostuvo que el mineral es extraído de manera ilegal explotadores informales y organizaciones al margen de la ley.
Las cifras de la Oficina de Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (Unodc) son más conservadoras, pues su último reporte habla de un área de explotación de 94.733 hectáreas en 2022, y de esa cantidad, el 73% se consideró explotación ilícita (69.123 hectáreas). Dicha explotación ilícita se concentra en los departamentos de Chocó, Antioquia y Nariño.
Eso sin contar que, según Barrera, han dejado de entrar nuevos proyectos a Colombia. En su concepto, eso se debe a que “no hay garantías jurídicas que brinden seguridad a las empresas de que se van a mantener en el tiempo, por eso prefieren otros países con menos incertidumbre”.
Por ahora es muy probable que el oro se mantenga con buenos precios mientras los mercados sigan en incertidumbre y los inversores refugien parte de su capital en el metal precioso.