Es toda una paradoja: Medellín se ha vendido recientemente como una ciudad turística que tiene mucho para ofrecer a los extranjeros que la visitan. Y tal vez por lo mismo, si usted –amable lector– hace un repaso mental, posiblemente se le ocurran varios establecimientos de comidas rápidas o de otros sabores del mundo a donde llevar a los viajeros que arriban a la capital paisa.
Pero, ¿le pasaría igual sin en vez de hamburguesas o sushi busca recomendar a los visitantes donde encontrar gastronomía local que vaya más allá de la bandeja paisa?
Por fortuna, para los que sienten que faltan varios de estos espacios en la ciudad, la Universidad de Antioquia ha anunciado la reapertura de su restaurante en el paraninfo de la UdeA, en pleno centro de Medellín, el cual desde mitad de 2025 traerá una interesante propuesta en este sentido.
La iniciativa, nombrada como Fogón Antioqueño, es impulsada desde el centro de educación superior y busca hacer una triple moñona: por un lado, revitalizar este punto de la capital antioqueña y, por el otro, darle por fin el impulso como epicentro turístico que se merece, y que apenas está despuntando.
Una moñona turística
En esta primera parte, el proyecto busca que el Paraninfo se convierta en una opción para que vecinos, residentes y hasta turistas se enamoren del espacio y lo incluyan en su cotidianidad y visitas, ya sea para degustar un delicioso almuerzo o para conversar en la tarde alrededor de un buen café.
Así mismo se espera que el restaurante del emblemático edificio se vuelva un punto para charlas académicas que tengan de fondo el tema de la construcción colectiva del conocimiento, aplicado a la gastronomía.
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En segundo lugar, la oferta gastronómica que tendrá el nuevo espacio se centrará en rescatar aquellos platos patrimoniales de la región que, ya sea por la modernidad o por el desuso de sus ingredientes, han caído en la bruma del olvido.
Por ello, la carta del restaurante la compondrán platos como sopa de cura en vereda, codito de cerdo, sancocho de res y de cerdo, frijoles antioqueños, aborrajados, panelitas de coco, entre otros.
“¿Qué encontraran los visitantes?, pues toda una experiencia. Verán cómo el Fogón Antioqueño sigue vigente por medio de estas preparaciones y cómo se consolida ese legado de los ancestros que lo traemos al presente, por medio de los esfuerzos de los estudiantes y de todo el saber cultural y antropológico”, comentó Wber Ríos Ortiz, decano de la Facultad de Ciencias Farmacéuticas y Alimentarias de la UdeA.
En este sentido cabe destacar que el espacio en el que queda el restaurante rezuma un aire nostálgico que parece trasladarlo a uno a otros tiempos donde el centro era tal vez menos caótico.
El interior del renovado restaurante está compuesto de las macizas sillas de madera que se veían antes en las casas de los abuelos y las paredes y puertas de antiguo diseño que evocan ese modernismo que definía la arquitectura de inicios y mediados del siglo pasado en el corazón de Medellín.
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“Este esfuerzo que estamos haciendo se une a los recientemente hechos por parte de la UdeA de recuperar el Centro de Medellín y entre los que se cuentan la apertura del Museo de La Vida en el edificio La Naviera y el café UIncluye –que es atendido por personas con discapacidad cognitiva– en este mismo espacio. El tema del restaurante es importante porque además significa la reapertura, después de 20 años, de este espacio en el paraninfo con una oferta más amplia que apunta a rescatar los fogones antioqueños y la cultura gastronómica paisa”, detalló el decano.
Ciencia en la cocina
Y el tercer aspecto que completa la moñona, según explicó Ríos es que el Fogón Antioqueño permitirá impulsar el programa de Ciencias Culinarias de la Facultad, que justamente aboga por el rescate de las tradiciones culinarias desde un enfoque académico. Por ello, las recetas ofrecidas serán influenciadas por los aportes y las investigaciones derivadas del programa.
“Entonces esperamos brindarle a la comunidad, en ese espacio privilegiado, una opción de probar algo diferente que traiga esos sabores de los fogones antioqueños, sabores impulsados por iniciativas de docencia e investigación; porque en el espacio no solo se servirá la comida, sino que también se tocarán temas de formación e investigación con estudiantes y profesores”, añadió.
De la iniciativa también hacen parte la Corporación Interuniversitaria CIS, la estrategia Cultura Centro de la Alcaldía, así como otras facultades y escuelas de la Universidad de Antioquia que consideran que apuestas de este tipo serán un gran éxito en la consecución de los objetivos trazados.
“Estamos totalmente convencidos de que privilegiar espacios como este van a permitir que la gente que visita el centro se pueda apropiar de su cultura, lo que a su vez repercutirá en que se mantenga viva la tradición culinaria paisa y que incluso impacte a otros públicos, como los turistas. Esta es una gran apuesta de ciudad que puede ayudar a comprender la importancia del Fogón Antioqueño y el impacto que puede tener en el mundo pues la gastronomía paisa es muy rica y variada”, detalló el decano.
Si bien el restaurante funciona hoy en día por medio de una oferta por demanda, se espera que a mediados de 2025 comience en forma la comercialización de sus platos para agasajar a todos aquellos que quieran disfrutar de los platos que comían los ancestros antioqueños.
