En una casa común y corriente en el barrio Robledo, las autoridades encontraron una de las caletas de droga más grandes en los últimos tiempos en Medellín.
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Mediante un operativo, la policía realizó un allanamiento a la vivienda y tras inspeccionarla de arriba a abajo encontraron en el sótano 150 kilos de marihuana empacada de diversas maneras y la cual estaba lista para ser dosificada allí mismo y posteriormente distribuida para su comercialización.
“Encontramos en este lugar el almacenamiento de 150 kilos de marihuana. En este lugar se almacenaba y dosificaba para distribuirla y que fuera comercializada alrededor de colegios y parques públicos”, manifestó el comandante de la Policía Metropolitana, Óscar Lamprea.
Kenedy y San Martín de Porres eran de los barrios donde la droga iba a ser distribuida. Según Lamprea, el tráfico de drogas es uno de los cinco delitos priorizados en Medellín para combatirlo, justamente, por el impacto que, según el uniformado, tiene este delito en entornos donde quedan expuestos niños, niñas y adolescentes.
“No solamente vamos a garantizar que los entornos como las instituciones educativas y los parques estén libres de consumo, sino que vamos detrás de estas estructuras que se dedican al tráfico y que no han entendido que son una prioridad de la administración para que no sigan mediante el negocio de la droga condenando a nuestras nuevas generaciones”, manifestó el secretario de Seguridad, Manuel Villa Mejía.
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De acuerdo con las autoridades, la droga incautada pertenecería al grupo delincuencial “El Polvorín” y generaba rentas ilegales por más de $350 millones mensuales.
El pasado mes de junio las autoridades también habían encontrado 150 kilos de marihuana al interior de un taxi que se movilizaba por el barrio Moravia.
Cabe recordar que esta semana se cumplen siete meses de vigencia del decreto mediante el cual el alcalde Federico Gutiérrez prohibió el consumo de drogas a 100 metros a la redonda de instituciones o establecimientos educativos públicos y privados, parques y plazas públicas, centros deportivos y recreativos, así como en eventos públicos o privados con presencia de menores de edad.
Sin embargo, la medida, según se evidencia fácilmente en las calles, no parece haber tenido un impacto relevante, pues los puntos críticos de consumo se mantienen en comunas como El Poblado, Robledo, La Candelaria, Aranjuez, Manrique, entre otros.
La Alcaldía hasta ahora no ha entregado nuevos detalles ni balances sobre qué tan eficaz ha sido esta prohibición.
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