Son graves las denuncias hechas hoy en el Concejo de Medellín —a raíz de los primeros 15 días del mandato de Federico Gutiérrez— por parte del secretario de Gobierno de la ciudad, Nicolás Ríos, quien también fungió como coordinador general del empalme con la administración de Quintero.
En su intervención, Ríos no solamente sostuvo haber encontrado líos financieros, sino indicios de irregularidades que deberían ser investigadas por la Fiscalía General de la Nación.
“El proceso de auditoría forense continúa profundizándose en esos temas en donde vamos haciendo énfasis. La lupa está puesta en todas partes, en temas financieros, de contratación, de personal y en toda la desadministración que hubo”, expresó el secretario, anticipando que dentro de las entidades y programas con problemas están el Centro de Bienestar Animal La Perla, Ruta N, Emvarias, la Agencia de Cooperación e Inversión, entre otros.
“Se encontraron cifras maquilladas o mal presentadas. Va a ser el plan con menos cumplimiento de los últimos 25 años en Medellín. Pasaban la plata y ni un solo ladrillo puesto”, añadió Ríos, refiriéndose a la ejecución del pasado plan de desarrollo municipal.
El presidente del Concejo, el corporado por el Partido Creemos, Andrés Tobón, hizo un decálogo de los hallazgos comunicados por Ríos en la red social X.
“En apenas 15 días de haberse iniciado la aplicación de técnicas de auditoría forense en tan solo el 2% de la contratación del municipio, en Inder y Metroparques, se han encontrado nueve procesos con presuntos hallazgos penales que serán entregados a la Fiscalía”, fue el primer punto que abordó Tobón.
En otro aparte, Tobón recordó que Ríos apuntó que más del 70% de los secretarios de despacho en los estertores del quinterismo llevaban menos de un año en el cargo. “Por ende no sabían qué estaba sucediendo y no conocían la información”, agregó.
Uno de los puntos más graves que se mostraron en el Concejo fue la modificación y ampliación de los objetos sociales de entidades —como Metroparques— en asuntos que no eran su misionalidad como es la adecuación de infraestructura deportiva, por ejemplo. Así como la modificación en manuales de contratación de algunas entidades, permitiéndose adiciones de contratos de hasta el 2.000%.
“Dejaron sin plata la semaforización y herramientas de control de la Secretaría de Movilidad para el año 2024. Hay baja calidad en la operación de La Perla producto de la segmentación de operadores. La administración tiene problemas para ingresar al Morro de Moravia, producto de la presencia de estructuras criminales dedicadas al loteo ilegal. Hay quejas por presuntas coimas en Ruta N para lograr contrataciones en la entidad”, agregó Tobón en el balance.
Finalmente, en los faltantes en infraestructura apareció que del Tramo 1 del Metro Ligero de la 80 solo se avanzó en un 19%, cuando la administración de Quintero había prometido dejarla en 80%. Tampoco hay reportes de avances en metros cuadrados de espacio público construidos en el proyecto Parques del Río Norte.
Ante el balance presentado en el Concejo, el corporado del partido Independientes Juan Carlos Upegui se mostró sorprendido por la visión “pesimista y de narrativa catastrofista” del informe, que según él no se corresponde con los indicadores estratégicos que a él “le hubiera gustado ver reflejados” en el informe del empalme.
Upegui resaltó que en la evaluación no se haga mención a que la administración de Quintero, de la que él hizo parte, de la reducción de deuda de Medellín en un 20% así como que bajó el desempleo a 8,1%, comparados con el 13% en que la dejó Gutiérrez en 2019. También dijo que no se habló del récord de turistas que ha llegado a la ciudad, ni la recuperación de obras de infraestructura como el Metrocable del Picacho o Hidroituango de la que dijo que el quinterismo “recuperó”.
“Yo quisiera que en un ánimo de renuncia al dogmatismo hubiera algún reconocimiento de algo positivo (a la pasada administración). De pronto el sectarismo no los deja. Quisiera que tuviéramos una visión más equilibrada del estado de la ciudad. Porque con estas visiones catastrofistas termina perdiendo Medellín”, dijo Upegui.
Cabe recordar que a raíz de las denuncias hechas por los descalabros de la pasada administración, la Fiscalía ha generado imputaciones por presuntos casos de corrupción en seis contratos divididos en varios componentes: como el Mantenimiento de zonas verdes, el mantenimiento del Parque de las Aguas, los contratos de logística y el manejo de Buen Comienzo.
De hecho, la corporada Claudia Carrasquilla indicó que actualmente el exalcalde de Medellín tiene varias denuncias ante la justicia que incluyen: dos denuncias por tráfico de influencias, dos por peculado por apropiación, tres por interés indebido en celebración de contratos, cuatro por firma de contratos sin cumplimiento de requisitos legales, tres por prevaricato por omisión, siete por prevaricato por acción, tres por intervención en política, dos por concusión, uno por favorecimiento de voto fraudulento, uno por concierto para delinquir agravado.
