Con un escueto comunicado a través de redes sociales, la Clínica de las Américas de la 80, una de las IPS más importantes de Medellín, anunció que a partir del primero de marzo no atenderá partos. “Nos enfocaremos en fortalecer la experiencia en nuestros servicios dirigidos a la población pediátrica y a la mujer”. Una decisión que en años recientes han tomado otras grandes clínicas y hospitales como el San Vicente Fundación y la Clínica del Rosario ante la inminente caída de los nacimientos en la ciudad y lo poco rentable que les resultan los servicios de obstetricia.
Puede leer: “La placenta es el órgano del territorio”: el obrar de las parteras del Valle de Aburrá
Hay que recordar que según cifras de la Registraduría Nacional, en la última década los nacimientos en el país han caído un 43,6% en la última década, pasando de 742.610 nacimientos en 2014 a 419.002 en 2024. De ellos, Antioquia es el departamento con más casos: 49.018, es decir que cada día nacen 135 seres humanos, la mayoría de ellos en Medellín, pues si en la capital ya es difícil encontrar un hospital donde nazcan niños, en el resto del departamento es peor.
La entidad explicó que durante los últimos años en la sala de partos de la clínica Las Américas se estaban atendiendo entre uno y dos nacimientos diarios “una situación que resultaba insostenible debido a la baja demanda en relación con los recursos requeridos”.
Agregaron que la atención obstétrica en el país tiene una regulación compleja y requiere que haya personal especializado disponible 24/7, por lo que las cuentas no le daban a la clínica. “Ante este panorama, la situación fue debidamente escalada a las entidades reguladoras y aseguradoras, lo que llevó a la decisión de cerrar el servicio de partos en nuestra institución”, concluyeron.
Entérese: Caída en picada de nacimientos en Colombia: durante los últimos 10 años se han reducido un 43,6%
De acuerdo con el Manual Tarifario de Salud decretado por el Gobierno Nacional para este año, las EPS le deben girar a las IPS en promedio $4.702.800 por una operación cesárea o $2.876.900 por la atención de un parto vaginal.
“La tarifa de los servicios profesionales en la atención del parto (normal, intervenido o cesárea), incluye además de la consulta preanestésica, los controles médicos preparto ambulatorios a partir del octavo mes y de trabajo de parto”, se lee en el manual.
Hace poco más de un año, en noviembre del 2023, la Personería Distrital de Medellín lanzó una alerta ante la cascada de cierres de servicios obstétricos que se intensificó ese año, cuando cerca de una docena de IPS solicitó el cese de ese tipo de servicios. Para esa misma época, según reveló el portal web El Armadillo, en Medellín había apenas 15 salas de parto para atender cerca de 100 nacimientos al día, además de abortos y otras emergencias obstétricas. En 2023, en la capital antioqueña nacieron 31.983 personas. Los otros municipios con más nacimientos fueron Rionegro, Apartadó y Caucasia.
Entre las consecuencias de los cierres de estos servicios, además de que las madres del departamento cada vez deben buscar y desplazarse más para buscar donde tener sus hijos, aumentando los riesgos de enfermedades graves o muertes, está el aumento de barreras de acceso y garantías de derechos para realizar interrupciones voluntarias del embarazo en condiciones dignas, además del incremento de violencia obstétrica y reproductiva, según señaló el ente de control.