Grecia se hartó de la falta de acciones por parte de los países de la UE para alivianar una grave crisis migratoria de la que es casi su núcleo. El gobierno de Alexis Tsipras se siente solo en la lucha por ayudar a los cientos de miles de personas que está acogiendo, a la vez que traicionado al ver el incumplimiento del pacto para el reparto de migrantes.
Por este motivo, ayer llamó a consultas a su embajadora en Austria, Jrissula Aliferi, a la vez que su primer ministro lanzaba una advertencia. “A partir de ahora Grecia no va a dar su aval a acuerdos comunitarios si no se garantiza que habrá un reparto obligatorio entre los Estados miembros”, dijo Tsipras ante el Parlamento.
Por su parte, el ministro de Exteriores, Nikos Kotzias, explicó las razones de la retirada de la embajadora en Austria: “Los grandes problemas de la Unión Europea no pueden abordarse con pensamientos e iniciativas extrainstitucionales que están enraizados en el Siglo XIX. Esas acciones podrían socavar los cimientos de la unificación europea”.
Kotzias hace referencia a las políticas austriacas de exclusión de migrantes, y en especial a la reunión regional del miércoles sobre control fronterizo en la que Austria omitió a los griegos.
En voz de su ministra del Interior, Johanna Mikl-Leitner, Austria respondió: “Grecia dice que no es posible controlar la frontera externa. Y si no puede hacerlo, proporciona el mejor argumento para que otros impongan medidas”.
Tal como afirmó a EL COLOMBIANO Eric Tremolada, abogado, experto en derecho internacional y docente de la Universidad Externado, este escenario de disputa interna en la UE era previsible:
“Grecia presiona a los demás para que reciban cuotas de migrantes, toda vez que el 60 por ciento de la migración que llega por el Mediterráneo pasa por dicho país. Mientras que tiene las ciudades llenas de refugiados, sufre las imposiciones del bloque para que no los deje pasar fronteras. La disyuntiva es entonces, o todos asumen las obligaciones en la UE, o harán un trato diferenciado y presionarán en particular a los griegos”.