Ante la llegada masiva de peticiones de asilo, el gobierno griego detuvo las devoluciones de refugiados a Turquía mientras redefine sus listados de inmigrantes a deportar.
Desde el lunes, cuando comenzó el proceso, producto de un acuerdo con la Unión Europea para cerrar la principal ruta de migración ilegal hacia ese continente, las demandas de asilo han crecido exponencialmente.
Solo en Lesbos, donde hay alrededor de 3.150 refugiados en el centro de detención de Moria, se han registrado 2.800, y una situación similar se vive en Quíos, donde de cero peticiones de asilo se pasó a 540.
El vocero de la coordinadora del Gobierno para la gestión de los refugiados, Yorgos Kyritsis, confirmó que la llegada de demandas de asilo de “último minuto” ha planteado “un problema práctico”, y agregó que en un inicio las autoridades griegas elaboraron un listado con 490 inmigrantes a deportar, de los cuales 202 ya fueron devueltos.
La decisión se dio en medio del anuncio de que el Papa Francisco visitará Lesbos entre el 14 y el 15 de abril.
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