Este sábado 8 de febrero, un potente sismo de magnitud 7.6 se registró en el mar Caribe, aproximadamente a 209 kilómetros de la costa de las Islas Caimán, cerca de Honduras, lo que activó alertas de tsunami en diversas regiones.
El evento sísmico, que ocurrió a poca profundidad, fue reportado por el Servicio Geológico de Estados Unidos (Usgss).
Las autoridades de monitoreo en Estados Unidos alertaron sobre la posibilidad de olas peligrosas en varias costas del Caribe occidental, incluyendo a Colombia, especialmente en las islas de San Andrés y Providencia.
Además, se prevé que las olas puedan afectar a otras naciones caribeñas en las próximas horas, como Jamaica, Cuba, México, Honduras, Bahamas, Haití, República Dominicana, Belice, entre otras.
Según el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico, el sismo podría generar olas de gran peligrosidad a lo largo de un área de aproximadamente 997 kilómetros desde el epicentro, abarcando una vasta zona de la región, que incluye también a países como Costa Rica, Panamá, Nicaragua y Guatemala.
A pesar de la magnitud del evento sísmico, las autoridades locales continúan evaluando la situación, y no se han reportado daños graves hasta el momento. Sin embargo, el riesgo de tsunamis sigue vigente en las próximas tres horas, por lo que se mantiene la alerta para las zonas costeras mencionadas.
Esta noche el Servicio Geológico Colombiano señaló que de acuerdo con el último reporte de la Dimar en Colombia, no existe amenaza de tsunami para la costa del Caribe de Colombia por el sismo ocurrido al norte de Honduras.
Y es que de acuerdo con la Dimar basado en los datos disponibles, el sismo con epicentro en Honduras, no tiene las características necesarias para generar un tsunami en la costa Caribe colombiana.