El comerciante guatemalteco Roberto Leonel Hernández, de 41 años, murió horas después de haber sido atacado por pistoleros en una de las habitaciones de la Clínica Las Américas, donde se recuperaba de heridas de bala que le propinaron el 26 de enero, en el barrio Laureles, occidente de Medellín.
El extranjero, quien tenía una taberna y llevaba siete años viviendo en Medellín, recibió dos impactos de bala el pasado viernes, en una de las piezas del quinto piso del centro asistencial, al que ingresaron dos sicarios, uno de ellos disfrazado de enfermero, quien resultó herido en la reacción de un policía que le brindaba seguridad a otro paciente.
Un segundo sicario fue capturado por la Policía cuando intentaba escapar, después de tirar un revólver a uno de los techos del centro asistencial.
Se investiga si un tercer atacante logró escapar.
Hernández fue sepultado ayer a las cinco de la tarde en el cementerio Jardines Montesacro, de Itagüí.
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