Julio Édgar Gaviria Arenas, hijo del legendario arquero Julio Gaviria, y ex zaguero central de selecciones Colombia, falleció ayer en Medellín tras sufrir un paro cardiaco en su casa del barrio Las Palmas.
El defensor central, apodado Chonto como su padre Julio, arrastraba una enfermedad infecciosa en una pierna, y estaba a punto de terminar el tratamiento. Tenía una revisión en la tarde, pero sufrió el infarto cuando se preparaba para la cita médica, según relató Carlos Sánchez, esposo de la tía del ex jugador, Esther Arenas.
Julio Édgar debutó en 1965 con Atlético Nacional, pasó por Millonarios, Once Caldas, Medellín y América de Cali, equipo en el que se retiró en 1979. Jugó con selecciones Antioquia y con Colombia en la eliminatoria al Mundial de Brasil-1970.
Según escrito de Álvaro Galeano para el blog Cápsulas, Gaviria era uno de los consentidos del médico Gabriel Ochoa Uribe. "Con Millos, siempre Edgar será figura y a pesar de sus travesuras no pierde jamás la titularidad; con el doctor Ochoa se conoció la casa por cárcel; el doctor lo perseguía, lo encontraba en sus noches de bohemia y lo llevaba a su casa, en donde quedaba “amablemente ” hospedado hasta su total recuperación".
En el final de su carrera, Ochoa lo lleva al América campeón del 1979, donde encuentra, además, a Carlos Monsalve, Juan Manuel Bataglia, Alfonso Cañón, Américo Quiñonez, Ramiro Viáfara, Juan Ramón Cáceres y salen campeones con una muy buena actuación del Chonto, quien era suplente del argentino Albberto Pascuttini.
"Fue uno de mis mejores discípulos. Gran figura de Nacional, Millonarios, América y la Selección. Salió campeón con Millos en el 72. Recuerdo que cuando lo conocí como un muchachito jugaba en el antiguo equipo Sulfácidos. Allí actuaba de defensor lateral. Yo le insinué que podía ser un mediocampista de enlace, posición en la que se desempeñaba de gran forma, pero se consolidó como defensor. Fue la gran figura del Suramericano sub-20 cumplido en Bogotá en 1964. Un fenómeno en su puesto, uno de los mejores de Colombia", recordó José Saule, quien fue entrenador de Julio Chonto Gaviria padre.
Paz en su tumba.