La meta de inflación de este año se cumplirá por una fuerte caída del consumo interno y por que son menores las presiones sobre los precios.
Sin embargo, el valor de los combustibles (que el Gobierno congeló desde comienzos de año), continúa siendo una amenaza para que la inflación se controle.
El gerente del Banco de la República, José Darío Uribe, insistió en que si el Gobierno no baja el precio de la gasolina, la meta de inflación podría verse amenazada.
Y es que Colombia es el único país de la región que pese a que la cotización internacional del crudo ha caído más del 60 por ciento en los últimos seis meses (ayer cerró a 46,25 dólares el barril de petróleo de referencia WTI), mantiene congelado el precio interno. Ese dinero, que debería quedarse en los bolsillos de los usuarios va, por decisión del presidente, Álvaro Uribe, al Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles.
El directivo del banco central hizo pública su posición ayer en un foro sobre la crisis económica mundial, sus efectos sobre Colombia y lo que internamente se puede hacer para enfrentarla.
"Es importante que las reducciones en los precios internacionales de los productos básicos se transmitan en unos menores precios internos. Eso no solamente aplica al caso del petróleo sino también, en general, a todos los productos básicos".
José Darío Uribe consideró que una medida de esa naturaleza no solamente aliviaría el bolsillo de los hogares sino que, además, contribuiría a disminuir la inflación y las expectativas que se tienen sobre el comportamiento de los precios.
Dijo que, de esa manera, el Emisor tendría un mayor margen de maniobra para desarrollar su política monetaria.
Esta es la segunda vez que el gerente del Banco hace un llamado en este sentido. Hace un par de semanas planteó esta posibilidad, pero el ministro de Minas y Energía, Hernán Martínez Torres, respondió que el banco central debería más bien ocuparse de reactivar la economía interna en un momento de desaceleración como el actual.
Germán Verdugo, jefe de Investigaciones de Correval, consideró que la congelación de precios de la gasolina continúa siendo una molestia para el Emisor y por eso el gerente continúa haciendo afirmaciones públicas en ese sentido.
"Lo que está haciendo (José Darío Uribe) es un llamado público para que la política monetaria sea un asunto de todos, ya que depende de muchos otros agentes como empresarios, sindicatos y el Gobierno. Lo que le inquieta es que sería mucho más fácil que el precio interno recogiera toda la caída internacional", sostiene el analista.
David Santos, jefe de Investigaciones de Serfinco sostuvo que el Emisor no puede pisar muchos callos, pero está dejando claro que se puede maniobrar de manera distinta porque así como se aumentó el valor de los combustibles cuando subió a nivel internacional, lo mismo debería suceder ahora, cuando está en descenso.
"Y no hay duda de que eso ayudaría mucho a la meta de inflación. A comienzos de abril el Gobierno anunció que revisaría el futuro del Fondo, y lo que creo es que le hará una pequeña modificación a la baja pero que no será muy significativa", anotó Santos.
El ministro de Hacienda, Oscar Iván Zuluaga, le respondió al gerente del Banco, al señalar que antes de concluir el mes el Gobierno establecerá la política que aplicará con el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles pero descartó, de momento, una posible baja.
"No, por ahora, el precio de la gasolina está intacto. No se toca, lo ha dicho el Presidente, y lo que queremos ver es cómo puede operar el Fondo de Estabilización después del primero de abril, cuando se someterá a revisión", indicó.
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