Agradecido y condecorado por su gestión al frente de la Cuarta Brigada del Ejército, se despidió ayer de Antioquia el brigadier general Alberto José Mejía Ferrero. El oficial entregó, en medio de honores militares, el mando de la unidad al brigadier general Nicasio de Jesús Martínez Espinel.
Los agradecimientos del general Mejía fueron para las autoridades departamentales y municipales, al igual que para el sector empresarial antioqueño y para sus hombres, por el trato que le brindaron durante los dos años que cumplió como comandante de la Cuarta Brigada.
"En la dulzura de la victoria y en la amargura del dolor, siempre estuvieron a mi lado fortaleciéndome, animándome y llenándome de fe en la causa", señaló.
El oficial dedicó los honores que le rindieron a un grupo de soldados heridos en combate.
Luego de su paso por Antioquia, Mejía Ferrero cumplirá en adelante la importante misión en la capital de la República del redireccionamiento estratégico del Ejército.
En su reemplazo, el brigadier general Nicasio de Jesús Martínez Espinel, asumió por primera vez el mando de la unidad militar con jurisdicción sobre 91 de los 125 municipios antioqueños.
"Indudablemente que enfrento el mayor reto de mi vida. Esta altísima responsabilidad que asumo implica mi total compromiso y vitalidad, pues me corresponde continuar consolidando el trabajo que han liderado mis antecesores", sostuvo el general Martínez, como nuevo comandante.
A su salida, el general Mejía Ferrero fue condecorado por el Gobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, con el Escudo de Antioquia categoría oro, como reconocimiento a su aporte para la seguridad en el departamento. A nombre del alcalde de Medellín, Alonso Salazar, el secretario de Gobierno de la ciudad, Juan Felipe Palau, honró también al oficial con la medalla Alcaldía de Medellín, categoría oro.
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