Por daniel cardona henao
Se escucharon muchas sandeces sobre Rigoberto Urán en los dos años en los que no logró grandes hazañas: que solo es un segundón, que su tiempo ya pasó, que había tenido suerte y que nunca había hecho algo que realmente valiera la pena.
Pero, desde el primero de julio de este año, el pedalista de Urrao (Antioquia) se encargó de demostrar que, a los 30 años, se encuentra en otro de los picos altos de su rendimiento y que este Tour de Francia sirve para consolidar su nombre.
A lo largo de estos 21 días, expertos han coincidido en que sus principales armas para ser el subcampeón virtual fueron la preparación física y la inteligencia.
“A mí me duele mucho que lo hayan criticado, que le hayan dicho todas esas cosas, hoy les demuestra que estaban equivocados”, comenta Absalón Rincón, entrenador colombiano.
Precisamente, Rincón y el técnico antioqueño Raúl Mesa analizan, a continuación, las cinco razones por las que Rigoberto consolidó una magnífica performance en la principal vuelta ciclística del mundo, siendo el segundo en ella n