Para muchas empresas en el mundo, el trabajo remoto se convirtió en una parte esencial de la vida laboral desde hace un lustro, por la pandemia por covid-19. Este modelo ha sido adoptado por compañías, especialmente en los sectores de tecnología y servicio al cliente, como una valiosa “herencia” del confinamiento, ya que ofrece un escenario en el que colaboradores y empresarios ganan.
Aunque trabajar desde casa tiene ventajas como la flexibilidad horaria y la eliminación del tiempo de desplazamiento de la casa a la oficina, también presenta desafíos que, si no se gestionan adecuadamente, pueden impactar tanto la productividad como el bienestar personal.
“Esto también puede convertirse en una fuente de estrés si no se establecen límites claros entre la vida personal y profesional... Es fundamental que los trabajadores desarrollen rutinas y espacios dedicados exclusivamente al trabajo, ya que esto no solo mejora la productividad, sino que también protege la salud mental al prevenir el agotamiento y la ansiedad”, explicó María Fernanda Ruiz, experta en psicología laboral.
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Problemas más comunes del trabajo en casa
De acuerdo con lo anterior, estos son los problemas más comunes que enfrentan quienes trabajan desde casa, según la experta:
1- Confusión entre el tiempo laboral y el tiempo de ocio.
2- Pérdida de contacto social con compañeros de trabajo.
3- Alteraciones en el sueño y sensación de sobrecarga.
4- Dificultad para desconectar del trabajo.
5- Vulnerabilidad emocional, con síntomas de ansiedad, tristeza o irritabilidad.
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Consejos para un trabajo en casa efectivo
Para evitar los efectos negativos del trabajo remoto es crucial desarrollar nuevos hábitos y rutinas adaptados al entorno laboral en casa. Según WebPsicólogos, aquí hay algunas claves para gestionar el trabajo remoto sin que se convierta en una carga:
- Designe un espacio específico para trabajar: elija un lugar cómodo, bien iluminado y libre de interrupciones. Evite trabajar en el dormitorio para no afectar la calidad del sueño.
- Mantega una rutina matutina: levántese a la misma hora, dúchate, vístete y desayuna como si fueras a la oficina. Esto te ayudará a preparar la mente para el trabajo.
- Establezca un horario fijo: define un horario similar al de la oficina y respétalo. Esto reduce la ansiedad y mantiene la disciplina.
- Planifique su día: dedique los primeros minutos de la jornada a organizar tus actividades. Reserva tiempo para tareas que requieran alta concentración.
- Cree un entorno de trabajo enfocado: asegúrese de que su espacio de trabajo le permita concentrarse, como si estuviera en la oficina.
- Tome descansos regulares: incluya pausas a lo largo del día para evitar el agotamiento.
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- Marque el fin de la jornada laboral: establezca un ritual que indique el final de su día de trabajo, como apagar la computadora o salir a caminar.
- Reparta las tareas del hogar: si vive con otras personas asegúrese de compartir equitativamente las responsabilidades domésticas para evitar tensiones.
- Mantenga la comunicación: hable regularmente con sus compañeros de trabajo para evitar el aislamiento y fomentar un ambiente colaborativo.
- Sea indulgente con usted mismo: no te exija cumplir al 100 % en todo momento. Es importante reconocer tus esfuerzos y permitirte cometer errores.
- Respete los fines de semana y días festivos: aproveche estos días para descansar y realizar actividades de ocio, así permitirá liberar la mente y las cargas de estrés para comenzar una nueva semana con toda.