La viral breakdancer australiana Rachael Gunn, tras su controvertida participación en los Juegos de París, acaparó de nuevo la atención del mundo del deporte al ser nombrada la número uno del mundo en esta disciplina que debutó en los Olímpicos de 2024.
Su desempeño en los Juegos llamó la atención por su peculiar estilo al ejecutar este baile, pues el video de “Raygun” girándose sobre sí misma, tumbándose en el suelo e incluso realizando una pose similar a un canguro fue objeto de una oleada de críticas en redes sociales. Además, su actuación no convenció a los jueces y la calificaron con un cero.
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Pese a que terminó de penúltima en las justas de agosto, solo superando a un atleta descalificado, a la bailarina de 37 años le concedieron el puesto número uno de la lista de clasificación mundial de B-Girls (breakdancers femeninas) según informó la Federación Mundial de Danza Deportiva (WDSF por sus siglas en inglés).
A pesar de su resultado en las olimpiadas, el ranking mundial se basó en los resultados de las cuatro mejores competencias de cada atleta durante los últimos 12 meses, según detalló la Federación después de hacer pública la lista de las mejores atletas en el breakdance.
La Federación justificó que Gunn logró 1.000 puntos al obtener el primer lugar en el Campeonato Continental de Oceanía en octubre de 2023, siendo este desempeño el que determinó su posición, dijo la WDSF en un comunicado.
Aunque otras competidoras, como la B-Girl Riko de Japón, también lograron 1.000 puntos en la serie mundial, el ranking de Gunn tiene prioridad debido al nivel de la competencia en la que participó, de acuerdo con las reglas de la WDSF.
Además, resaltó que los puntajes en los Juegos Olímpicos no contribuyeron a la lista de clasificación debido a las “cuotas limitadas” de atletas.
La organización explicó que las clasificaciones cambiarán después de que expiren los puntos de 12 meses y cuando se celebre la próxima Serie Mundial WDSF Breaking for Gold en Shanghái en octubre de este año.
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Doctora en Estudios Culturales
Gunn logró clasificar a los Olímpicos de París, pues anteriormente fue la mejor clasificada femenina de la Asociación Australiana de Breaking en 2020 y 2021, y representó a Australia en los Campeonatos Mundiales de Breaking en París en 2021, en Seúl en 2022 y en Lovaina (Bélgica) en 2023.
Además, en la Universidad de Macquarie, en Sídney, cursó un doctorado en Estudios Culturales y una licenciatura en Música Contemporánea.
Según la institución, el trabajo de Gunn en lo académico “se basa en la teoría cultural, los estudios de danza, los estudios de música popular, los medios de comunicación y la etnografía”.
“La gente no entendería mi estilo”
Tras el revuelo que causó su baile, Gunn dio su primera entrevista al medio australiano The Project después de un mes de estar bajo el escrutinio mediático a nivel global. “En cuanto me clasifiqué, pensé: ‘Dios mío, ¿qué he hecho?’ Porque sabía que me iban a ganar y que la gente no entendería mi estilo ni lo que iba a hacer”, contó.
Las burlas y críticas a Gunn también amplificaron el debate sobre considerar el breakdance como un deporte olímpico. Frente a esta situación, la atleta se disculpó. “Lamento mucho la reacción negativa que ha enfrentado la comunidad, pero no puedo controlar cómo reacciona la gente”, expresó.
Además, al ser cuestionada sobre si realmente pensaba que era la mejor bailarina de breakdance de Australia, respondió: “creo que mi historial habla de eso”.
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