A conquistar tierras niponas

Mónica Sarai Arango, Estefanía Álvarez y la entrenadora Paula García viajan al Grand Prix.

Mónica y Estefanía han logrado oro en las competencia del ciclo olímpico: Bolivarianos, Centroamericanos y Suramericanos. FOTO afp

Satisfechas por el nombre que se han ganado a nivel internacional, pero convencidas de seguir avanzando en busca de los lugares de honor para estar en los Olímpicos de Tokio-2020, las nadadoras artísticas Mónica Sarai Arango y Estefanía Álvarez viajan en compañía de la entrenadora Paula Andrea García Pizarro a Japón para el Grand Prix internacional en el que estarán los 24 mejores dúos del mundo.

Una alerta

Los últimos tres meses no han sido fáciles para ellas, pues Mónica Sarai presentó complicaciones de salud y tuvo que estar fuera de entrenamientos tres semanas, tiempo en el que el estrés y la tensión alta por poco la noquean. Guardó reposo absoluto mientras salían los análisis a los que fue sometida por varios especialistas, entre ellos cardiólogos y neurólogos.

“Me sentía mal a pesar de que tengo un umbral alto para el dolor; fue duro verme enferma ya que nunca me había pasado nada. Es más, ni gripa me da, pero ahora tenía un dolor de cabeza constante y la tensión alta, a pesar de ser deportista, de cuidarme en la alimentación y hacer bastante ejercicio, eso no era algo normal”, recuerda la nadadora, quien tras el aval del médico tuvo que trabajar el triple para poder retomar el nivel y estar a la par con Estefanía para este torneo.

Por el momento Mónica está medicada y a la espera de tener un nuevo chequeo de control en unos meses.

“Estos días han sido de mucho esfuerzo, de recuperar en tiempo récord las horas que perdí, de volver al nivel para estar a la par de Estefanía pues en Tokio estarán los mejores 24 duetos del mundo y es allí donde debemos demostrar que seguimos en crecimiento”, resalta.

Sus palabras son respaldadas por la entrenadora: “Sabemos que a nivel suramericano estamos muy bien, somos medallistas de oro de los pasados Juegos, pero ahora nos toca mirar cómo están las europeas y en qué nivel vamos nosotras con relación con ellas; este torneo nos va a servir mucho para eso”.

Ambas destacan que tras dos años sin estar en Europa, lo importante es llegar muy receptivas para analizar los avances que tienen las rivales, para acatar las instrucciones que entreguen los jueces internacionales y seguir en crecimiento, pues se vienen otros cuatro retos importantes luego de Tokio, como lo son los Grand Prix de Estados Unidos y Canadá, y el Mundial de Corea antes de los Juegos Panamericanos, a los cuales ya están clasificadas.

La aventura arrancará este lunes con el viaje que las lleve a Japón para, desde el 27 de abril, iniciar la competencia. Esta será también la segunda oportunidad para mostrar su nueva rutina de dúo libre, en la que tienen que ser verdaderas guerreras porque la exigencia es total. Y la resistencia, su principal ingrediente.