Con la energía y el espíritu oriental que produce el kie (término japonés), un equipo de ultimate en Medellín arrasó en el Campeonato Nacional juvenil de esta disciplina, el cual se cumplió el fin de semana en la capital antioqueña.
Tras caer en el primer juego ante Evolution, el elenco dirigido por Mauricio Otálvaro, que contó con la participación de 16 deportistas, remontó y ganó los cinco duelos restantes para imponerse en este certamen.
Las canchas sintéticas de las unidades deportivas de Campoamor y Castilla fueron los tapetes predilectos para la presentación de este grupo de guerreros, como lo define su entrenador: “este triunfo es muy bueno porque nos potencia para el futuro, los muchachos vienen mostrando un gran nivel”.
Este club, que surgió en el 2006 y tiene 44 integrantes, se adjudicó el segundo torneo Nacional tras derrotar a Evolution (10-7). Precisamente, este último fue el primer campeón de la categoría.
“Este tipo de torneos es importante por la dinámica del deporte, se muestra interés y estoy convencido de que seguiremos creciendo”, concluye el técnico campeón.