Medellín saldrá esta noche a la cancha del estadio Metropolitano a dejar la piel, el alma y a poner las condiciones con el objetivo de lograr un buen resultado en el primer duelo de la final de la Liga Águila-1.
Sus integrantes saben que no será un partido fácil, pues al frente tendrán un Junior motivado y respaldado por su gente. Un equipo fuerte y con experiencia.
“La meta del título no es de ahora, nos la pusimos desde que empezó el torneo y por eso vamos motivados en busca de un buen resultado”, dijo David González que junto a Mao Molina se han convertido en bastiones para los jóvenes que disputan su primera final.
Uno de esos chicos que vive un sueño es Leonardo Castro, quien ayer estaba cumpliendo 24 años. El delantero pidió como deseo la estrella para el DIM.
“Esta experiencia de vivir la final es maravillosa. Cuando vine a Medellín tenía dos metas: ser el goleador y quedar campeón; lastimosamente no pude lograr la primera porque Miguel Ángel Borja ya se quedó con el botín, pero la opción del título está viva y vamos a pelearla con todo desde este miércoles en Barranquilla y el domingo en el Atanasio con nuestra gente”, dijo el ariete que suma 10 tantos en la Liga.
Aunque reconoció que tiene un poco de nervios, señaló que el respaldo de los jugadores de experiencia que tiene el equipo les ha ayudado para manejar la presión. Por eso la ilusión de ganar la sexta estrella es lo que más los alianta ahora.
Mauricio Molina, por su parte, señaló que experimenta muchas sensaciones. “Siento gran responsabilidad de ayudar a mis compañeros para intentar salir airosos de la final y ser campeones; darles esa alegría a los hinchas que nos han respaldado”.
El optimismo en el DIM es grande y la meta es volver con buen botín de Barranquilla.
