Superar las campañas que ha hecho en el campo internacional es uno los objetivos del año de Independiente Medellín, que este jueves enfrentará a Guaireña (7:30 p.m.) en el estadio Defensores del Chaco, en su debut en la fase de grupos de la Copa Sudamericana.
La mejor actuación que ha tenido el elenco rojo en un torneo de la Conmebol fue en 2003, cuando se convirtió en semifinalista de la Copa Libertadores (eliminado por Santos), luego de coronarse campeón de la Liga local en 2002, año en el que acabó con la sequía de 45 años.
Andrés Orozco, quien hizo parte de aquel grupo de futbolistas, cree que uno de los éxitos de esa época fue que “el equipo se fue conformando con los años, incluso antes, porque muchos de nosotros nos conocimos en la Selección Antioquia, pasamos por la Selección Colombia juvenil y cuando nos encontramos en Medellín siguió creciendo esa familiaridad”.
Para el exjugador, ahora analista, también fue fundamental la relación que tenían dentro y fuera de la cancha. “Las familias se reunían, compartían de muchas maneras. Eso, sumado a la calidad de los jugadores, el cuerpo técnico y los directivos, llevaba a que el equipo fuera más fuerte, a ser casi invencible”.
Por su parte, Óscar Pareja, quien vistió la camiseta del DIM entre 1987 y 1995, y también tuvo campañas dignas de recordar con esta institución, considera que siempre ha sido clave tener buenos grupos. “En las épocas más recordadas creo que se coincidió con que había un destacado elenco tanto en lo futbolístico como en el ambiente personal”.
El actual entrenador del Orlando City cree que Medellín tiene argumentos para ser protagonista en su quinta participación en la Copa Sudamericana, en la que viene de superar al América en la primera fase.
Además de Guaireña (Paraguay) también rivalizará con 9 de Octubre (Ecuador) e Internacional (Brasil).