El duelo entre Colombia y Brasil cerró la fase de grupos de la Copa América dejando a los dos equipos clasificados a la siguiente ronda gracias al empate a 1 gol. Sin embargo, los dos equipos salieron inconformes con las decisiones del VAR y el arbitraje, un penal no cobrado y un gol mal anulado fueron las razones para las quejas presentadas.
“Escandaloso”, así ha calificado el mundo del fútbol lo ocurrido con el VAR en la noche del día martes 2 de julio por un gol que le fue anulado al equipo colombiano en el primer tiempo del partido por un fuera de lugar que, desde las imágenes del videoarbitraje aún no son claras.
James Rodríguez cobró desde el costado derecho un tiro libre que cabeceó en el área el jugador Davinson Sánchez. La jugada terminó en gol, sin embargo, el juez de línea levantó la bandera indicando que había fuera de lugar por parte de los colombianos.
Lea también: “Tendríamos que haber ganado, pero debemos seguir con los pies en la tierra”: Néstor Lorenzo tras el empate 1-1 entre Colombia y Brasil
De acuerdo al protocolo de uso del VAR, como la jugada terminó en gol, se hace revisión de lo sucedido. Mauro Vigliano, juez argentino encargado de apoyar desde el videoarbitraje al central venezolano Jesús Valenzuela, le confirmó que sí existía el fuera de lugar.
Le recomendamos leer: Así está el historial entre Colombia y Brasil antes de su duelo por la Copa América 2024
Sin embargo, momentos después de reveladas las imágenes desde la herramienta tecnológica, algunos interpretaron que el VAR trazó mal las líneas que definen el fuera de lugar de un jugador, ya que no lo hicieron con la referencia de Davinson Sánchez que fue el que cabeceó, sino que tomaron en cuenta la posición de Jhon Córdoba, delantero colombiano que no participó de la jugada, anulando de esta manera lo que significada en ese momento el empate parcial del equipo cafetero.
Al parecer, Colombia no habría sido el único perjudicado por las actuaciones desde el VAR. En el minuto 42, Vinícius Júnior desbordó por la banda izquierda, luego entró al área colombiana e intentó regatear al lateral colombiano Daniel Muñoz, algo que no pudo lograr el jugador brasilero porque cayó sobre el terreno de juego.
En este instante, el venezolano Valenzuela detuvo el juego y solicitó la revisión del VAR para verificar si correspondía una posible pena máxima, pero las repeticiones mostradas desde el videoarbitraje no eran claras. Mientras en un ángulo se evidenciaba que sí hubo un contacto sancionable, en otro parecía que era el delantero brasilero el que había exagerado la caída, la decisión final fue no cobrar el penal y reanudar con un tiro de esquina.
Los dos entrenadores al final del encuentro se quejaron de las decisiones del videoarbitraje, siendo el más explosivo el director técnico de Brasil, Dorival Júnior.
“El árbitro fue decisivo. Dentro del estadio solo él y el VAR no vieron penalti, que con toda seguridad existió. Brasil fue muy perjudicado”, reclamó el timonel brasilero, “en aquel momento sería un 2-0 y con la velocidad que tenemos...”, fue lo que concluyó en su reclamo.
Por su parte, Néstor Lorenzo fue un poco más cauto, aunque no dejó pasar la oportunidad para expresar el descontento por algunas decisiones arbitrales.
“No vi la jugada (refiriéndose al posible penal sobre Vinícius); tampoco vi el fuera de juego (sobre el gol anulado a Davinson Sánchez) y me dijeron que fue gol”, fue lo que dijo el entrenador colombiano, quien no solo se expresó sobre el VAR, sino que también estuvo inconforme por decisiones tomadas por el central venezolano.