La tabla de las eliminatorias suramericanas está apretada: apenas cinco puntos separan al segundo (Colombia) del octavo (Ecuador) y todos pelean por las tres plazas y media que quedan en juego para el Mundial.
De los encuentros de hoy, cuatro selecciones se verán las caras entre sí como rivales directos: Paraguay-Uruguay y Ecuador-Perú.
Paraguay, que es séptimo con 21 puntos, revivió con su magnífica goleada en Chile y sabe que un triunfo ante otro rival directo puede ponerlo en puestos de clasificación. Todavía no ha ganado dos partidos consecutivos en la actual clasificatoria, ni siquiera en casa.
Uruguay, tercero con 24, esperaba llegar más cómodo a este cotejo, pero la realidad le achicó el margen de error. Acumula cuatro juegos sin vencer y visita un estadio en donde suma un empate y cinco caídas, en seis intentos.
“Vamos a enfrentar a un rival que no perdona”, dijo el defensa y capitán de Paraguay, Paulo Da Silva, quien advirtió que con 21 unidades aún no ganan nada.
Agregó que van a jugar sabiendo que necesitan los puntos y que se medirán ante una selección que es muy compleja.
“Haremos lo mismo de siempre, tratar de limitar al rival, crearle problemas. Paraguay viene de ganar (a Chile), se acercó a la zona de clasificación y va a ser duro”, manifestó el técnico uruguayo Óscar Tabárez.
El volante paraguayo Víctor Cáceres tiene claro lo que hay que hacer frente a un duro rival como el charrúa: “salir a buscar el resultado, estar tranquilos, no a lo loco. Somos conscientes que dependemos de nosotros mismos y eso es lo importante”, dijo.
Los guaraníes apelarán a su ventaja en el historial sobre los charrúas: siete triunfos, dos empates y cuatro caídas.
