Atlético Nacional atraviesa un momento delicado, no solo por su desempeño en la cancha, sino por las decisiones del cuerpo técnico tras un reciente incidente de indisciplina que ha generado descontento entre los hinchas. El regreso de Harlen Castillo, Jorman Campuzano y Dairon Asprilla al once titular en el partido contra Atlético Bucaramanga, después de haber sido implicados en un polémico episodio tras el duelo de ida de la Copa Betplay frente a Alianza en Valledupar, ha generado una ola de críticas entre la afición verdolaga.
El club, en su momento, emitió un comunicado confirmando que la situación se había manejado internamente. Sin embargo, el hecho de ver nuevamente a estos jugadores en acción fue percibido por muchos seguidores como un “premio” a la indisciplina. A ello se sumó su pobre rendimiento en la derrota 1-0 ante Bucaramanga, lo que no hizo más que encender la controversia. La hinchada esperaba medidas más severas, especialmente porque otros jugadores, con mejor comportamiento y en mejor forma, se quedaron en el banco o fuera de la convocatoria.
Tras el encuentro, el técnico Efraín Juárez fue cuestionado sobre la inclusión de estos jugadores en el equipo titular, a lo que respondió de manera clara en la rueda de prensa: “Lo dejé muy claro la vez anterior, tengo un grupo de 26 jugadores que pueden rotar, todos tienen la oportunidad de ser titulares y suplentes, y yo decido quién va y quién no a la banca. Es un tema de rotación, estamos jugando prácticamente cada 48 horas. El partido pasado roté, en este también, y seguramente en el siguiente lo haré”.
No obstante, muchos aficionados no quedaron satisfechos con esta explicación. Para ellos, la situación trasciende más allá de una simple rotación de jugadores, pues consideran que ciertos futbolistas, como el portero Luis Marquínez, que había mostrado un gran nivel en el partido de vuelta contra Alianza, merecían más la titularidad que Harlen Castillo. Del mismo modo, el desempeño de Marino Hinestroza, que ingresó al partido y demostró estar en mejor forma que Dairon Asprilla, fue señalado como un claro ejemplo de una mala elección del cuerpo técnico.
Según información obtenida por EL COLOMBIANO, la situación disciplinaria fue abordada con sanciones económicas para los jugadores involucrados, lo que permitió que Joan Castro, Dairon Asprilla, Harlen Castillo, Jorman Campuzano y Killian Toscano estuvieran nuevamente habilitados para jugar. Sin embargo, algunos de ellos no seguirán en el equipo para la temporada 2025. Es el caso de Joan Castro y Harlen Castillo, quienes ya tienen decidido su destino fuera del club.
El incidente, que involucró a cinco jugadores, también puso en el ojo del huracán a Juan Pablo Torres, quien inicialmente fue señalado como parte del grupo de indisciplinados. No obstante, al revisarse las imágenes, se confirmó que no era él quien aparecía en los videos, debido a la ausencia de un tatuaje distintivo que Torres tiene en su pierna.
El escándalo actual trae a la memoria de los hinchas verdolagas el incidente del 14 de diciembre de 2018, cuando Dayro Moreno tuvo un altercado en plena cancha con su compañero Jeison Lucumí. Aquel conflicto, bajo una administración diferente, llevó a la desvinculación inmediata del goleador tolimense, quien, a pesar de ser un referente en ese momento, no pudo escapar de la disciplina férrea que manejaba la institución. Esta vez, la actual administración, junto con el cuerpo técnico, optó por un enfoque distinto, limitando las consecuencias a sanciones económicas y permitiendo que los jugadores implicados continuaran jugando.
El próximo desafío para Nacional será este jueves, cuando enfrenten al Junior de Barranquilla a las 8:30 p.m. en el Atanasio Girardot. Ante la presión por el resultado y las críticas por las recientes decisiones, muchos esperan que jugadores como Luis Marquínez y Marino Hinestroza sean considerados por encima de Harlen Castillo y Dairon Asprilla, quienes no han demostrado estar a la altura de las expectativas. En este mismo sentido, Andrés Sarmiento, otro de los jugadores cuestionados por su bajo rendimiento desde que llegó al equipo, también es objeto de discusión entre los hinchas que piden mayor competitividad en el plantel.
La situación de Atlético Nacional sigue tensa, y cada decisión parece ser un nuevo detonante para la polémica. El club, que ha sido sinónimo de grandeza en el fútbol colombiano, está atravesando una fase complicada.