Este martes, desde las 7:00 p.m., Colombia afronta uno de los partidos más exigentes y determinantes de las Eliminatorias rumbo al Mundial, nada menos que ante Argentina en el estadio Monumental de Buenos Aires. El compromiso no solo tiene un peso estadístico, sino también emocional y simbólico. La Tricolor, que hace menos de un año jugaba la final de la Copa América frente a la Albiceleste, hoy llega a este duelo sumida en una crisis de resultados, envuelta en rumores y cuestionamientos, y con la necesidad urgente de sumar para enderezar el rumbo.
Cinco partidos sin conocer la victoria han encendido las alarmas. Si bien Colombia sigue dentro de la zona de clasificación, la presión ha aumentado considerablemente, sobre todo después de los puntos perdidos como local frente a Perú. El margen de error es cada vez más estrecho, y este partido podría ser el punto de inflexión para una selección que, a pesar de las dificultades, todavía tiene la clasificación al alcance de la mano.
“Sacando cuentas finas, 3 o 4 puntos más para estar en el Mundial. Sé que nos vamos a clasificar, estoy absolutamente convencido”, dijo el técnico Néstor Lorenzo con una mezcla de fe y necesidad.
El entrenador argentino ha sido blanco de críticas en los últimos días, especialmente tras los rumores sobre un supuesto enfrentamiento con el delantero Jhon Durán. “Me duelen las cosas que inventaron. Hay una clara campaña de desprestigiar. Más allá de que los resultados no fueron buenos, la selección debería estar más arriba”, agregó.
Para este duelo, Lorenzo cuenta con el regreso de su figura ofensiva: Luis Díaz. El guajiro, ausente ante Perú, vuelve a ser la esperanza de gol de Colombia, compartiendo ese rol con Luis Suárez y el ‘Cucho’ Hernández. “No convocamos a otro delantero porque con el regreso de Luis ya tenemos cubierta esa posición”, explicó el entrenador.
Díaz, precisamente, protagonizará un duelo estelar frente a Lionel Messi. Ambos jugadores son los máximos anotadores de las Eliminatorias con seis goles, y este choque no solo definirá puntos, sino también quién sigue comandando la tabla de artilleros. Lionel Scaloni confirmó que el astro argentino será titular: “Leo va a jugar de entrada, no tenemos duda. Esperemos que la gente disfrute de él y del equipo”, anticipó.
Scaloni, a pesar de la mala racha de su rival, no subestima a Colombia. “Para mí ha merecido ganar un montón de partidos en los que no ha tenido suerte. Su posición en la tabla es engañosa. Está a la altura de las mejores selecciones del mundo y nos va a poner las cosas complicadas”, reconoció el estratega campeón del mundo.
La cita en el Monumental evoca recuerdos imborrables. El 5 de septiembre de 1993, Colombia escribió una de las páginas doradas de su historia con el inolvidable 5-0 ante Argentina en ese mismo escenario. Han pasado casi 32 años desde entonces y la Tricolor no ha vuelto a vencer en suelo argentino en un partido de Eliminatorias. Esta generación tiene la oportunidad de romper esa sequía, de volver a escribir su propio capítulo en una historia que merece nuevas glorias.
Luis Suárez, en la previa, lo dijo con convicción: “Colombia, por historia, por todo lo que representa vestir esta camiseta, va a dar la batalla. Va a ser muy duro, pero estamos preparados”.
El contexto es claro: un buen resultado no solo consolidaría la posición en la tabla y acercaría la clasificación, sino que sería un golpe anímico fundamental. Serviría también como respuesta interna y externa ante las críticas, demostrando que el grupo está unido y comprometido con el proceso Lorenzo.
Hoy, el destino vuelve a poner a Colombia frente a Argentina, como en aquella final de Copa América en Estados Unidos.
Pero esta vez, el guión puede cambiar. Este martes, en el Monumental, la Tricolor no solo se juega puntos: se juega la credibilidad, la esperanza y el derecho a soñar nuevamente con un lugar en el Mundial.
