En La Paz, Cesar, en su tierra natural, será sepultado el cuerpo de Jorge Oñate, el interprete vallenato fallecido el domingo en el Hospital Pablo Tobón Uribe, de Medellín.
El féretro del llamado Jilguero de América fue trasladado el mismo domingo a Valledupar, donde fue recibido por una multitud de fanáticos que lo esperaron a las afueras del aeropuerto, Alfonso López Pumarejo.
Con una masiva caravana, los seguidores acompañaron el féretro del artista, hasta la biblioteca departamental, Rafael Carrillo Lúquez. Allí la Gobernación del Cesar le rindió un homenaje, que fue transmitido por redes sociales, y la mañana de este lunes el cuerpo fue llevado a La Paz, Cesar, donde también le rinden tributos de parte de la población.
Hasta Valledupar llegó Silvestre Dangond, que era ahijado de Oñate, y que estuvo muy cerca del también llamado Ruiseñor del Cesar, en su proceso médico. Precisamente en el avión privado de Silvestre se transportó a Medellín y posteriormente de regreso a casa la familia de fallecido maestro.
A Silvestre se le vio muy afectado, con lágrimas abrazando el ataúd de su padrino.