Shakira comenzó su gira Las mujeres ya no lloran World Tour el pasado 21 de febrero. No ha pasado un mes, ha dado 7 conciertos y ha cancelado 4: uno en Lima por problemas de salud; otro en Medellín, por inconvenientes con el montaje y dos más en Santiago de Chile, también por problemas en el montaje.
Sacando el de Perú, que fue un inconveniente suyo, de salud, los otros tres shows han sido cancelados por inconvenientes técnicos, “en los que no ha tenido que ver el equipo de producción de la artista”, sino los equipos locales, como lo han reiterado insistentemente.
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En Medellín, exactamente, fue un daño en el techo que es el que soporta la pantalla gigante. En Chile, en cambio, el problema fue de nivelación, “el suelo está desnivelado y no se encuentra debidamente estabilizado para garantizar la seguridad de mi banda, bailarines, mis fans y la mía propia”, escribió la barranquillera.
Como lo dijo ella misma, “es la gira más grande de mi carrera y actualmente, una de las producciones más grandes del mundo”, la pregunta que queda, tras estas cancelaciones, es entonces: ¿Estamos preparados en América Latina para un montaje así?
¿Qué está pasando con el montaje de la gira que está fallando tanto?
Las Mujeres ya no lloran es la gira más grande en la carrera de Shakira, y actualmente es una de las más grandes del mundo.
El montaje, que incluye, entre otras cosas, una pantalla de 40 metros de largo por 12 metros de alto, que se abre por el centro y puede dividirse en tres partes. Una pasarela con tecnología interactiva para proyectar visuales en tiempo real y un sistema de luces robóticas de 360 grados que se sincronizan con la música, pesa 62 toneladas. El diseño estuvo a cargo de la empresa TAIT Towers, que también ha trabajado con Beyoncé y Taylor Swift.
Todo eso que incluye el escenario viaja de una ciudad a otra, y de ese montaje se encarga el equipo de producción de Shakira. Pero, previo a eso, en cada ciudad hay una empresa local encargada de hacer el montaje base de la estructura.
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“La producción local es la base de todo. La producción del artista le envía al productor local planos y diseño con cargas específicas para poder hacer el montaje y ellos te entregan tarima, techo y toda la estructura. Si esa producción no está perfecta la producción del artista no va a arriesgarse”, dice John Sepúlveda, el primer empresario que trajo a Colombia a Elton John, Bon Jovi y Gloria Estefan.
En tres de los cuatro conciertos que Shakira ha tenido que suspender hasta ahora el problema ha estado ahí, en la producción local. El daño en Medellín, del techo, lo explicó Gabriel García, presidente de Páramo, los organizadores de la gira en Colombia.
“El techo en un concierto no es sólo por si llueve, sino que es donde se cuelga todo lo que hace parte del concierto, las pantallas, las luces, cosas de escenografía (...) En este concierto en particular, el peso es demasiado, en el caso de Medellín tuvieron que traerlo de México”, dijo a Caracol Radio.
El dañó aquí ocurrió cuando lo estaban instalando, y tuvo que ver con una fatiga del material de la estructura.
Por ese daño es posible que ya el techo no aguante el peso que se necesita y los ingenieros estructurales que deben dar la certificación no la dieron y sin esa certificación no nos podemos arriesgar. Buscamos otras alternativas, pero no era suficiente”, dijo.
Un daño de esa magnitud pone en riesgo toda la seguridad del evento, el techo se puede caer sobre el escenario y afectar a la artista, músicos, bailarines, staff e incluso terminar en una estampida.
“Lo más complejo de todo lo de Shakira es la movilidad que tiene la pantalla, esto requiere materiales hidráulicos y es demasiado grande. Y los días de un show son tan pegados, unos de otros, que ante cualquier falla es imposible solucionar pronto”, dice Blanca Luz Holguín, quien fuera organizadora de eventos y conciertos de RCN Radio.
En Chile el daño fue otro
“Nos hemos encontrado con inconvenientes técnicos ajenos al artista y su producción, que impiden el correcto desarrollo del concierto, ya que el suelo donde iría el escenario se encuentra desnivelado”, dice el comunicado de Fenix Entertainment, la productora encargada en dicho país.
“Ahí el tema ni siquiera es del crew de Shakira, es un tema del proveedor local que tiene que armar una infraestructura básica para recibir la producción de la artista. Y en esa producción básica es donde estuvo la falla. Lo que pasó en Chile es que esa estructura básica se torció y eso es gravísimo, con tres centímetros que una estructura de esas se hunda, eso ya es un peligro el verraco, porque todo eso es un diagrama de transmisión de cargas que varía enseguida”, dice Julio Correal, quien va a hablar del tema en el próximo capítulo de su programa de YouTube Hágale Don Julio.
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La tercera, un medio chileno, detalló lo sucedido y ahí es en donde el factor tiempo, mencionado por Blanca Luz, toma relevancia: “En el Estadio Nacional de Chile, el montaje del concierto –de 62 toneladas– empezó el lunes 24 de febrero. Sin embargo, ya el viernes 28 se comentaba en el equipo técnico que las condiciones del escenario no eran óptimas y que había negligencias al respecto. Por ejemplo, surgieron inconvenientes con el techo del montaje, con su piso y con las pantallas. Se habla en la interna de una estructura mal instalada y de un ‘hundimiento estructural’ (...) Se quiso seguir adelante, pero el domingo 2 ya fue demasiado encima”, escribieron.
Pero entonces, ¿En América Latina las empresas locales no están capacitadas para hacer montajes de este tipo? Para Julio Correal sí están preparadas: “Las producciones más grandes que han venido a Colombia, Colplay, The Weekend, Karol G y Bad Bunny que han sido súper producciones no tuvieron ningún problema. Es un factor suerte, me atrevería a decir, no sé que pasó antes de que se torciera la estructura”, dice.
Pero según el diario La Tercera y su sección Culto, “el coliseo deportivo entregó la cobertura habitual que se utiliza para proteger la cancha. Sobre ella, la productora instaló una segunda capa para montar la tarima y es ahí donde habría surgido el desnivel y la hendidura que puso en aprietos los recitales”.
Finalmente, otra fuente consultada por EL COLOMBIANO, y que hace parte de una empresa que ha sido proveedor técnico de más 1.500 conciertos en el país, dice que el problema de fondo es la planeación, las fechas y los tiempos entre un concierto y otro que no son suficientes para el traslado del montaje. Es decir, asegura que no es un asunto de las productoras locales, sino del equipo de la artista.
Lo de Shakira no se pudo corregir, ni en Medellín ni en Chile, y ahora va a tener que reprogramar los tres conciertos. Es decir, casi que va a tener que hacer otra gira por Suramérica, al parecer en noviembre.
Por ahora no hay novedades en los conciertos que siguen en Argentina, el 7 y 8 de marzo. Aunque hasta ahora solo se ha sabido de los problemas pocas horas antes de los shows. En el caso de Chile, algunos fanáticos ya estaban en los alrededores del Estadio Nacional cuando se informó de la cancelación del concierto.
Para algunos de los consultados también ha sido cuestión de mala suerte, para otros definitivamente son errores humanos que se pudieron evitar.
