Por agencias y redaccion
Estados Unidos mostró una cara bien diferente a la presentada ante Colombia y definió fácil anoche el encuentro ante Costa Rica en su segunda salida en el grupo A, 4-0.
La contundencia dejó con vida al equipo de Jurgen Klismann y con la posibilidad de clasificar, mientras el onceno dirigido por Óscar Ramírez quedó al borde de la eliminación y con la obligación de ganarle, en el último compromiso del grupo, a Colombia y esperar el resultado que le favorezca entre EE. UU. y Paraguay.
Primer tiempo perfecto para Estados Unidos. Los norteamericanos salieron a definir temprano y lo consiguieron, después de un susto sufrido, a los 4 minutos, en un disparo del tico Joel Campbell.
La historia del cotejo comenzó a cambiar a los 8’ de la inicial en una falta cometida por Cristian Gamboa sobre Bobby Wood. El central de Costa Rica desestabilizó a Wood y el árbitro Roddy Zambrano no dudó en sancionar la falta dentro del área.
El cobro lo hizo Clint Dempsey, quien dejó sin ninguna opción a Patrick Pemberton. De ahí en adelante el panorama no cambió y el dominio local tampoco. Ni siquiera el cambio realizado por el técnico Ramírez al entrar a Álvaro Saborio por Marcos Ureña, mejoró el funcionamiento de los costarricenses.
Y la goleada que se veía llegar fue apareciendo con el transcurrir de los minutos. A los 36 aumentó Jermaine Jones y antes del descanso, a los 41’ amplió Bobby Wood.
El 3-0 se mostraba justo en esos 45 iniciales, porque el equipo de casa fue mucho más ofensivo y efectivo, que incluso pudo terminar con un mayor resultado el primer tiempo.
En el segundo, Estados Unidos salió más conservador, porque la iniciativa, por obligación, era para Costa Rica, que de entrada hizo dos cambios, ingresando José Salvatierra y Randall Azofeifa, pero tampoco fueron solución para los ticos que naufragaron.
A Klinsmann, en cambio, le sonrió todo, porque Zusi, quien ingresó a los 69 minutos, fue el encargado de aumentar la cifra a 4-0 con el puntillazo a los 87 minutos .
