Con 93 votos a favor - 3 en contra, la Cámara de Representantes aprobó en cuarto y último debate la prohibición de las corridas de toros en Colombia.
Esta es considerada una decisión histórica tras 14 intentos, pues es “una expresión que atenta contra la dignidad y la vida de los animales”. Se espera que el proyecto pase a sanción presidencial para ser firmada por el mandatario Gustavo Petro y convertirse en Ley.
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Las plazas de toros se usarán como escenarios deportivos y de eventos para dinamizar la economía y el buen hábito: “Serán adecuadas para conciertos, ferias, actividades lúdicas, deportivas o como establecimientos comerciales que dinamizarán la economía y el empleo”, precisa la iniciativa.
El presidente Gustavo Petro se pronunció aplaudiendo este nuevo logro realizado en el Congreso de la República: “Felicitaciones a quienes por fin lograron que no sea un espectáculo la muerte. Quienes se divierten con la muerte de animales terminarán divirtiéndose con la muerte de seres humanos; como los que queman libros terminarán quemando seres humanos (sic)”, dijo el mandatario en su cuenta de X.
¿Por qué aprobaron la prohibición de las corridas de toros y no de las corralejas?
Para explicar estas dos situaciones es necesario entender el significado de cada una.
De acuerdo con la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, una corrida de toros “es un espectáculo en el que se corren o lidian varios toros bravos a pie, en un recinto cerrado construido para tal fin, la plaza de toros”.
“Para ser corrida de toros es preciso que las reses lidiadas tengan de cuatro a seis años, hayan pasado un reconocimiento veterinario que certifique su integridad y sean sacrificadas por espadas que hayan tomado la alternativa de matadores de toros, es decir, que sean «maestros»”.
Las corralejas también consisten en cerrar a un toro dentro de un recinto con arena y rodeado de tribunas. La diferencia entre ambas es que en las corralejas no hay toreros, ya que los asistentes son los que se enfrentan al animal huyendo, pegándoles y amarrándolos con cuerdas. En las corralejas no tienen como finalidad matar al toro, sino “entretenerse”.
Según contó una activista por los animales, la estrategia de prohibir las corridas toreras estuvo fundamentada en que anteriormente se caía el proyecto en la Cámara, ya que las corralejas suelen estar más arraigadas a las regiones del país y esto generaba temor en los representantes para votar a favor.
“El proyecto de ley prohíbe el rejoneo, novilladas, becerradas y tientas, pero no de las corralejas. Las corridas tienen reglamentación del Congreso. Es decir, hay un estatuto nacional taurino aprobado por el Congreso de la República del año 2004, la ley 916 que las reconoce. Las demás actividades ni siquiera se han regulado como es el caso de las corralejas”, dijo a EL COLOMBIANO la representante a la Cámara, Jennifer Dalley Pedraza Sandoval.
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”Las corralejas necesitan un trabajo distinto, que implica que los autores del proyecto se muevan a las regiones en las que se da este evento taurino, que se haga pedagogía y se enseñe a la ciudadanía que estas prácticas son de maltrato” puntualizó.
Así que, definitivamente empezaron a debatir el tema de las corridas de toros y ya después se presentará un nuevo proyecto para hacer lo mismo con las corralejas.
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