Recientemente, Carlos Rivas, ejecutivo y expresidente de la organización, se quejó de la falta de representación que han tenido en el nuevo Gobierno.
En los últimos dos días se ha enrarecido el ambiente en el grupo designado para el empalme de la cartera de educación del Gobierno de Gustavo Petro. ¿La razón? Se han levantado voces críticas para advertir que no ha habido la representación suficiente del sindicato de maestros, Fecode.
Carlos Rivas, uno de los ejecutivos de Fecode, pidió que le abrieran un espacio en los empalmes. “Estamos profundamente extrañados de que no nos hubieran convocado a la comisión de empalme”, puntualizó Rivas.
Sostuvo que fue una forma de “maltrato” contra los docentes del magisterio, una posición que venían defendiendo desde hace varios días. “Estoy opinando, Petro debe escuchar a los diversos sectores de la sociedad, con los primeros que debe hacer empalme es con el pueblo”, aseguró recientemente Rivas.
Rivas ha argumentado que Petro ha priorizado a otros sectores de “derecha” por encima de Fecode y reclama que ellos le dieron su respaldo mucho antes que otras figuras políticas, pues tienen una amplia influencia entre los profesores de colegios públicos.
En la cartera de educación, según quedó expuesto en las listas públicas del empalme, se incluyeron figuras como el exrector de la Universidad de Los Andes, Alejandro Gaviria, quien se perfila como el ministro del nuevo Gobierno. También hay otros nombres como el del excandidato al Senado Gilberto Tobón Sanín.
Nelsón Alarcón, quien recientemente fue electo como el nuevo presidente de Fecode, le dijo a EL COLOMBIANO, que “están complacidos con el Gobierno de Gustavo Petro y Francia Márquez”.
Y señaló que sí los llamaron para incluir dos nombres dentro del empalme. Allí, dijo Alarcón, están trabajando Isabel Olaya y William Velandia. “El compañero habló a título propio, pero después cuando se dio cuenta de que estaban esos dos compañeros en la designación, él sale y corrige. Es una postura personal y no institucional”, aseguró.
No obstante, este diario consultó las redes sociales de Rivas y no encontró retractación alguna sobre su opinión.
