Por causa de las amenazas de narcos y grupos criminales que le pusieron precio a su cabeza, una perrita de raza pastor malinois tiene que dormir con escoltas en una base de la Armada Nacional, en el departamento de Amazonas.
Se trata de París, una canina antinarcóticos de cinco años de edad, que en lo corrido de 2024 ha contribuido a la incautación de 14 toneladas de droga (entre cocaína y marihuana) en el Trapecio Amazónico, la frontera que une a Colombia, Brasil y Perú.
Así lo destacó este marte el capitán de fragata Bernardo Silva, comandante del Grupo de Guardacostas del Amazonas, quien señaló: “Todos los resultados operacionales dirigidos al narcotráfico han sido obtenidos por destreza de la canina París y su guía, el infante de Marina profesional Sierra. Los depósitos ilegales y estas nuevas formas que encuentran los delincuentes para esconder la droga, han sido expuestos por ella”.
Las vertientes del río Amazonas son utilizadas de corredores por los grupos criminales fronterizos, que mueven cocaína y marihuana de variedad cripa (o creepy) desde Colombia, hacia pueblos peruanos y brasileros.
Tal cual lo ha denunciado EL COLOMBIANO, en este tráfico están involucrados principalmente el frente Carolina Ramírez del Estado Mayor Central de las Farc y el Primer Comando de la Capital, una banda de alcance transnacional que opera desde São Paulo.
La perra, “desde cachorra fue entrenada y preparada para esta clase de misiones. Su agudo olfato ha sido pieza fundamental para que los uniformados de la Armada localicen hasta en los sitios menos pensados de los botes los alijos de droga. Su alimentación es balanceada, a diario recibe preparación física y además goza de días de descanso. Estas rutinas permiten que siempre tenga buena salud, la destreza y disposición para detectar cargamentos ilegales”, resaltó un reporte de las Fuerzas Militares.