Las disputas al interior de los partidos, la reconfiguración del ajedrez político regional tras las pasadas elecciones, y el poder que ha venido acumulando el vicepresidente Germán Vargas Lleras, son algunas de las razones que explicarían la mala hora por la que está pasando la aplanadora de la Unidad Nacional en el Congreso, lo que sin duda pone en riesgo la gobernabilidad del presidente Juan Manuel Santos.
Y es que han sido varios los episodios que evidencian que los ánimos entre los partidos santistas están caldeados. El primer round tuvo lugar hace un par de semanas en el marco de la cumbre de gobernadores electos que se celebró en Villavicencio, donde Cambio Radical y el Partido Liberal se mostraron los dientes.
Al parecer, el director ejecutivo de la Federación, el liberal Amylkar Acosta, habría excluido de la agenda del evento a los ministros estrellas de Vargas Lleras, el de vivienda, Luis Felipe Henao, y la de Transporte, Natalia Abello, por lo que el Vicepresidente armó una cumbre paralela e invitó a los gobernadores a una comida en un restaurante de Villavicencio, a la que asistieron tanto él como Henao y Abello.
Los gobernadores electos sopesaron la situación y en vista del gran presupuesto que maneja Vargas Lleras, prefirieron atender la invitación que terminó opacando la cumbre organizada por Acosta.
Según le explicó el presidente de Cambio Radical, Rodrigo Lara, a EL COLOMBIANO, lo que ocurrió en la cumbre fue que el director de la Federación, Amylkar Acosta, “fue muy desobligante con nuestra colectividad al no invitar a los ministros de Vivienda, Transporte ni al Vicepresidente y todos los gobernadores querían escucharlos a ellos y por eso se organizó una comida para que pudieran reunirse”.
Según Lara, la exclusión de Vargas Lleras para participar en la cumbre no fue una casualidad o un simple olvido. “Eso fue orquestado con premeditación por un pequeño sector directivo del Partido Liberal porque hay que decir que las bases parlamentarias y políticas a nivel regional del liberalismo no expresan esa misma animadversión por Vargas Lleras”, agregó.
Serpa vs Vargas Lleras
Pero el rifirrafe entre los liberales y Cambio Radical no terminó ahí. Hace algunos días el senador Horacio Serpa subió la tensión entre las colectividades al afirmar que muchos de los comportamientos de Vargas Lleras “no corresponden a la dignidad que ejerce como Vicepresidente y menos siendo candidato a la próxima Presidencia”, y como era de esperarse los escuderos de Vargas Lleras salieron en su defensa.
El turno fue para el senador de Cambio Radical, Germán Varón, quien desmintió las versiones según las cuales las relaciones entre Vargas Lleras y el presidente Santos no estarían pasando por su mejor momento, y cuestionó las declaraciones de Serpa.
“Preocupa que un partido de la Unidad Nacional como el Liberal, a través del senador Serpa, haga sindicaciones de manera permanente y sin ninguna autoridad sobre la gestión del Vicepresidente. Si uno mira lo que fue el gobierno samperista, al que perteneció Serpa, deja mucho que desear frente al trabajo desarrollado por Vargas Lleras”, dijo Varón en entrevista concedida a Colprensa.
Para el profesor del Instituto de Estudios Políticos de la Universidad de Antioquia, John Fredy Bedoya, este tipo de situaciones son normales teniendo en cuenta el reacomodo de las fuerzas políticas en el país como consecuencia de las elecciones regionales.
Además, según Bedoya, los resultados de esa contienda confirmaron que Vargas Lleras es un gran elector y lo dejaron en muy buena posición de cara a las presidenciales de 2018, “y eso puede causar molestias en algunos sectores de la Unidad Nacional, sobre todo cuando el Partido de la U era el que estaba acostumbrado a llevar las riendas”.
Molestias en la U
Pero como si no fuera suficiente para la Unidad Nacional el contrapunteo entre el Partido Liberal y Cambio Radical, en la U, el partido del presidente Santos, también se han dado conatos de rebelión.
El expresidente del Senado, José David Name, habló la semana pasada a nombre de la bancada costeña de parlamentarios y condicionó el apoyo de ese grupo de congresistas a las iniciativas de carácter oficialista a que el gobierno tomara las medidas necesarias para garantizar que el precio del gas fuera el mismo para el interior del país como para la Costa, pedido que finalmente se concretó y al que cedió el Ejecutivo.
“Esto ocurrió porque llevábamos más de un año pidiéndole al Gobierno que atendiera esa problemática y no lo hacía. Afortunadamente el lunes solucionaron ese tema”, dijo Name, al tiempo que aseguró que la colectividad sí acompañará al Gobierno en su intención de sacar adelante la ley estatutaria del plebiscito para la paz y el proyecto que aumenta el cupo de endeudamiento.
Name también se refirió a las quejas que desde algunos sectores de la U se han hecho a la manera en que el senador Roy Barreras estaría ejerciendo la vocería del partido. “En todos los partidos hay momentos de dificultades y este tipo de diferencias son normales, pero más que con Barreras, el descontento generalizado es con el trato que el Presidente le ha dado a su partido en comparación con Cambio Radical”, puntualizó.
En cuanto a Vargas Lleras, Name dijo que no hay ningún tipo de problema personal. “Si él ha acumulado todo ese poder es porque el Presidente se lo ha permitido. Él -Vargas Lleras- está haciendo su trabajo y si le dan esas facultades tiene que utilizarlas”, acotó el senador costeño .