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Meten a los derivados del cannabis en planes de salud
La resolución está lista. Falta la firma de la Ministra de Salud para que esté vigente. ¿De qué forma opera y a quiénes cobija?
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Dentro de los beneficios medicinales de la marihuana están el alivio de los dolores, controlar las náuseas y tratamientos para enfermedades como la epilepsia y la esclerosis. FOTO JUAN ANTONIO SÁNCHEZ
08 de diciembre de 2022
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Las propiedades medicinales de la marihuana, planta que carga a cuestas el peso de la estigmatización y la criminalización de la guerra contra las drogas, podrían empezar a ser contempladas en Colombia. Todo un cambio.
El Ministerio de Salud ya tiene un proyecto de resolución en el que establece los criterios de financiación a cargo de la Unidad de Pago por Capitación (UPC) para “las preparaciones magistrales a base de derivados de cannabis”. Esto se traduce en que estarán en los planes de salud del país.
En el documento de 134 páginas –que aún está sin número– se establecen los servicios y tecnologías de salud financiados con esos recursos de la UPC.
En el parágrafo 3 del artículo 111 se explica que los derivados de la planta no estarían de forma directa en la lista de medicamentos que financia el Estado, pero que las EPS podrían reportar sus costos bajo unas condiciones puntuales.
El borrador de la resolución señala que para el reporte de prescripción y dispensación de derivados del cannabis por parte de las EPS “se habilitará un tipo de reporte exclusivo (...), que se encuentra inmerso en los criterios, procedimientos, requisitos y obligaciones descritas en la solicitud de información a EPS”.
Esto quiere decir que estos medicamentos solo podrán ser cargados a la UPC si son prescritos por un profesional de la salud que pertenezca a una IPS que esté dentro de su red.
Por otro lado, este proyecto de resolución establece que las IPS y EPS deberán estar atentos a “entregar información de seguimiento a posibles efectos adversos”, así como mantener actualizados los programas de fármacovigilancia y de la “prescripción y uso de preparaciones magistrales a base de derivados de cannabis”.
Consultado por EL COLOMBIANO, Julián Quintero, investigador de Acción Técnica Social (entidad sin ánimo de lucro que promueve la regulación legal de las drogas), señaló que Colombia está en mora para que medicamentos a base de marihuana sean incluidos dentro de los medicamentos que financia el Estado “tanto por los beneficios a los afiliados, como para los interesados en acceder a tratamientos con derivados del cannabis”.
“Unas gotas de marihuana pueden costar hasta $200 mil, lo cual, en comparación a otros medicamentos, no es caro, pero tampoco es barato y no estaría al acceso de todos”, asegura.
Finalmente, dice que es necesario un estudio minucioso para saber en qué tratamientos “el Estado debe apoyar y gerenciar el cannabis y en cuáles no, para que así se atienda lo que pide el paciente y el mercado. La industria ha tenido restricciones y regulaciones que no han dejado despegar este mercado”.
Desde el Ministerio de Salud aclararon que aún faltan unos detalles técnicos y jurídicos para validar la medida.
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