Exnegociadores están preocupados por implementación del acuerdo de paz en el Gobierno Petro

El exnegociador Humberto De la Calle y el ex Alto Comisionado para la Paz Sergio Jaramillo jugaron un papel clave en el acuerdo de paz entre el gobierno de Juan Manuel Santos y la antigua guerrilla de las Farc. Foto: Archivo.

Humberto De la Calle y Sergio Jaramillo advirtieron que no ha sido nombrado un director para la Agencia para la Reincorporación y Normalización, ni creado el Sistema Nacional de Reincorporación y Normalización.

El senador Humberto De la Calle y Sergio Jaramillo, exembajador de Colombia ante Bruselas de los gobiernos de Santos y Duque y ex Alto Comisionado para la Paz, manifestaron a través de un documento de ocho puntos su balance sobre la implementación del acuerdo de paz firmado en 2016 con las Farc, tras cumplirse seis años de su firma. Además, manifestaron algunas de su preocupaciones al gobierno de Gustavo Petro.

La principal queja de los exnegociadores hacia el gobierno de Petro es el hecho de que aún el mandatario no haya definido quién será la persona que liderará la ejecución del acuerdo de paz y que esto también se refleje en el Plan Nacional de Desarrollo.

El cuestionamiento de los exnegociadores es que pese a que ya fue nombrado el Alto Comisionado de la Paz para liderar esa ejecución, “es humanamente imposible que el comisionado, además de estas tareas, se encargue eficazmente de la implementación del Acuerdo de Paz”.

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Sumado a eso, De La Calle y Jaramillo señalan que “tampoco ha sido nombrado un director en propiedad de la Agencia para la Reincorporación y Normalización, ni se ha creado, como estaba previsto, el Sistema Nacional de Reincorporación y Normalización”, por lo que “el bienestar de 12.700 excombatientes de las Farc está en juego”.

También hicieron “un llamado a proteger la JEP que en los últimos meses ha mostrado resultados sin precedentes en un proceso de paz” como por ejemplo, “los reconocimientos voluntarios de responsabilidad ante un tribunal por crímenes de guerra y de lesa humanidad”.

Finalmente, en el documento expusieron que como exnegociadores hacen “un llamado a la Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia a no descuidar el mandato del Consejo de Seguridad de verificación de la implementación del Acuerdo -su principal tarea en Colombia-”.

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Ambos concluyeron afirmando que aunque no desconocen “las buenas intenciones del nuevo Gobierno”, están dispuestos “a ayudar en lo que sea necesario para avanzar en la implementación del acuerdo” y así mismo invitaron “a pasar lo antes posible de la palabra a la acción, para que él proceso de paz no siga perdiendo terreno en Colombia”.