En entrevista con EL COLOMBIANO, el director de la Administradora de Recursos del Sistema de Salud (Adres), Félix Martínez Martín, habló sobre el cierre de 2024 para las finanzas del sector, golpeado por las deudas que afectan a hospitales y clínicas, entidades promotoras de salud (EPS) y pacientes.
Es la entidad encargada de darle a las EPS la plata para administrar la atención médica de sus afiliados. El funcionario reconoce que el Ministerio de Hacienda no les ha dado los recursos para pagar deudas de 2022.
En contexto: ¿Por qué la Adres suspendió pagos por $70.000 millones a 52 IPS y qué les espera?
¿Cuánta plata se le ha girado a Sura en este año?
“A noviembre le habíamos tirado $9,7 billones: $8,1 billones del contributivo, $430.000 millones de prestaciones excepcionales y $1,09 billones del subsidiado”.
¿Esas cifras fueron por concepto de Unidad de Pago por Capitación (UPC)?
“Por concepto de UPC, pero también están los Presupuestos Máximos (PM), que son las prestaciones excepcionales; recobros; servicios que no están en UPC ni en PM, los recursos de promoción y prevención y las incapacidades”.
¿Cómo cierra la Adres el tema de giros a las EPS este año?
“La Adres ha ejecutado para el cierre de este año un presupuesto de $95 billones, lo que significa un incremento del 15% con respecto a 2023. Todos los años el gasto que se gira por UPC aumenta, y en estos dos últimos años fue un 15% anual, que es muy por encima de la inflación y todas las cotizaciones de los trabajadores, que son apenas un tercio del ingreso al sistema de salud. Este año creció en un 20%”.
¿Cuánta plata pagó la Adres a las IPS por giro directo?
“El giro directo venía con un promedio de $2,1 billones concentrado en el régimen subsidiado. Hubo alguno por algunas EPS pequeñas del contributivo que tenían medidas de vigilancia especial de la Superintendencia de Salud, pero este año se amplió a partir de abril y mayo notoriamente porque las EPS intervenidas entraron obligatoriamente en giro directo y las que no tienen patrimonio adecuado. Eso hace que la mayoría quedaran en giro directo”.
¿Ese cambio qué implica?
“Que las EPS que están obligadas a giro directo tienen que postular ante la Adres cómo le pagan a su red de prestadores el 80% de los recursos que reciben mensualmente por UPC. Ellos pueden recibir el 20% y tienen que mandarnos la nómina de todas sus redes de servicios a las que les van a pagar en un mes. Entonces, Adres paga lo que postula la EPS”.
¿Entonces las ocho EPS intervenidas funcionan así?
“Correcto. Y también algunas sin intervención que no cumplen con el patrimonio adecuado, como Sura, que está en giro directo y está muy contenta, por cierto, con ese mecanismo. Tengo que decir que las clínicas y los hospitales reciben el mismo día y a la misma hora el 80% del pago y que no hay ninguna demora en ese proceso. El giro que estaba en $2,1 billones llegó a $4,8 billones en octubre. Y, como entró Coosalud, pasará de $5 billones mensuales. Aclaro que son $7,1 billones mensuales lo que giramos por UPC, de los cuales a $5 billones van directo a clínicas, hospitales y proveedores ordenados por las EPS”.
¿Hace cuánto fue el último giro que se les hizo a las EPS por Presupuestos Máximos (PM)?
“Estamos pagando octubre. Se pagó para el régimen subsidiado y esta semana está comprometido el pago para el régimen contributivo”.
O sea, quedarían faltando noviembre y diciembre.
“Sí, pero los giros de PM van 60 días después de la UPC. Todos los años el sistema de salud arranca con un presupuesto que, por ejemplo, para 2024 creció entre 7% y 8%, pero después se determinó un aumento de la UPC en 12%. Entonces, quedan cinco puntos porcentuales que no estaban en el presupuesto nacional, que implican un esfuerzo permanente del Gobierno para completar los recursos de UPC primero y después los de PM. Eso significa que todos los años hay un esfuerzo presupuestal y cerramos, de pronto, 2022 sin haber pagado el ajuste de PM de 2021, y 2023 sin el de 2022. Siempre queda un remanente que se pasa para la vigencia siguiente. Pero la deuda con las EPS del ajuste de 2022, que el Ministerio de Hacienda no ha girado, es menor que los años anteriores”.
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¿Hacienda está al día con los ajustes de 2022 y de 2024?
“Hacienda no nos ha provisto $819.000 millones de ese ajuste. Pagamos el año pasado el ajuste de 2021 dos años tarde. Estos ajustes son otra adición más porque después de pagar el año, ese ministerio hace un ajuste entre lo que sobró y faltó en las EPS. Entonces, como el año pasado había un déficit inicial de 2023, de cerca de $9 billones, se cubrieron poco más de $8 billones, por lo que el Gobierno y el Congreso decidieron reconocerlos como deuda pública. Pero de esa deuda pública no nos han llegado los recursos y no se ha reconocido ese dinero”.
Las IPS alertan que están en crisis por falta de pagos. ¿Cómo explicar esto si están haciendo giro directo?
“Hay una protesta de la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas porque se dan cuenta de que la mayoría del giro directo se lo llevan IPS integradas por las EPS. Es decir, el problema de integración vertical, según las cifras de giro directo, es que las EPS mandan más dinero a sus propios negocios que a los otros hospitales y clínicas. Es lo que he llamado un proceso de competencia desleal porque les pagan mejor, les pagan más tarifas o les pagan más oportunamente, pero a las que no son de ellos les pagan con más lentitud”.
¿Cómo puede probar eso?
“Publicamos siempre al final del periodo quiénes son los principales beneficiados por giro directo y ahí se ve claramente que la mayoría son negocios integrados de las EPS”.
Pero si el 80 % del giro lo hace la Adres, ¿esas deudas de las IPS de dónde provienen?
“Hay EPS que manejan mejor el dinero que otras y tienen déficit de mínimos y pagan bien a sus proveedores. Hay una diferencia enorme entre EPS. Por ejemplo, Nueva EPS tiene un problema financiero más grave porque en 2023 los gastos crecieron en $10 billones. Cada caso es distinto”.
Gremios de EPS y expertos llevan años alertando que la UPC es insuficiente para cubrir los servicios de salud. ¿Considera que es así o sí alcanza?
“La UPC siempre aumenta todos los años por encima de la inflación. En promedio 4% o 5%, además del costo de la inflación y de las inclusiones. Es un aumento significativo y es muy difícil para un Estado hacer incrementos a uno de los rubros más grandes. El peso sobre el presupuesto nacional es más grande y la condición presupuestal del Gobierno no es la maravilla. Siempre he dicho que si se plantea que hay que gastar más dinero en salud, también hay que plantear de dónde va a salir”.
Pero entonces, ¿la UPC es suficiente o insuficiente?
“Las cifras que conozco tienen problemas tan graves de información, que resulta difícil para los responsables ajustarla. Tienen muchos problemas de información que no acaban demostrando una necesidad real mucho mayor. Por otra parte, en ningún país la plata de salud alcanza y siempre tendrá restricciones. Pero si se maneja mal la plata —muchas empresas lo hacen bastante mal; no todas, hay algunas más serias que otras—, eso hace que alcance menos. Como cuando se la roban, cuando se usan cientos de intermediaciones para sacar margen de los negocios o cuando hay estímulos a inventar gasto que no conviene”.
