El Juzgado 9° Penal del Circuito de Bogotá condenó a los expresidentes de la Refinería de Cartagena S.A.S. (Reficar), Felipe Castilla Canales y Orlando Cabrales Martínez, por su responsabilidad en el escándalo de corrupción que se gestó en esa firma entre 2009 y 2012.
Además de la condena de cinco años y cuatro meses, los expresidentes deberán pagar una multa de 66 salarios mínimos legales vigentes. También fueron inhabilitados para ejercer funciones públicas por el lapso de 80 meses.
La investigación demostró que Canales Castillo, presidente de Reficar entre el 29 de abril y el 1 de octubre de 2009, y Cabrales Martínez, quien estuvo a cargo de esta empresa entre el 2 de octubre de 2009 y el 21 de noviembre de 2012, intervinieron en el direccionamiento irregular del contrato de ampliación, modernización, mantenimiento y puesta en marcha de la refinería.
Es decir, entregaron el contrato a una compañía extranjera (Foster Wheeler & Process Consultant) de manera directa y no convocaron a un concurso público.
Esto implicó, según el reporte de la Fiscalía, que no hubo “una selección objetiva de proponentes, ni un proceso de evaluación o selección que garantizaran la designación de una compañía que tuviera un alto perfil o experiencia para la construcción del proyecto”.
Además, los implicados le dieron al contratista autonomía para gerenciar y controlar con libertad el megaproyecto de 95 millones de dólares.
Castilla Canales irá a una cárcel y Cabrales Martínez, de 82 años y graves afectaciones de salud, pagará su sentencia en la casa.
Felipe Castilla expidió un comunicado en el que cuestionó la sentencia del juzgado, alegando que hubo irregularidades durante el juicio oral.
“El juicio se adelantó, en múltiples oportunidades, sin dirección ni presencia de un juez. La juez se retiró (...), adelantó otras audiencias de manera simultánea y no tuvo la oportunidad de evaluar la totalidad de las evidencias de la defensa”, redactó, anunciando que apelará la condena ante un tribunal superior.
