“Desde la Secretaría de Salud e Inclusión Social estamos haciendo un seguimiento constante a los jóvenes heridos por el accidente ocurrido en el Nordeste antioqueño. Los 15 jóvenes hospitalizados se encuentran estables en diferentes instituciones: el hospital de Yolombó, la Clínica del Norte de Bello y de Medellín en la clínica Las Américas, los hospitales General y Pablo Tobón Uribe y en el San Vicente Fundación”, explicó Marta Cecilia Ramírez Orrego, secretaría de Salud e Inclusión Social.
La funcionaria reiteró que desde la Gobernación de Antioquia se continúa brindando apoyo psicosocial a los accidentados, a sus familias y a los familiares de las personas fallecidas. Este acompañamiento continuará hasta que sea necesario.
"Cualquier persona que tenga dificultad en la atención, o que sienta que en algún momento requiere un apoyo adicional, desde el Hospital Marco Fidel Suárez de Bello está nuestro equipo atento a canalizar las inquietudes, para que tengan la asistencia necesaria. De nuevo lamentamos esta situación que nos tiene en duelo a los antioqueños", concluyó.
David, el niño Ángel
Uno de esos jóvenes que se encuentra fuera de peligro es David Rúa Vallejo, quien fue el primero que, tras el accidente, pudo comunicarse para avisar de la tragedia y pedir auxilio.
Uno de los familiares de los jóvenes, consultado por EL COLOMBIANO , relató que David, junto con su hijo, lograron reaccionar cuando el autobús se fue al abismo, pero fue este adolescente quien logró escalar la montaña con las fuerzas que tenía su cuerpo y parar al primer vehículo que logró ver en medio de la oscuridad.
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"Rúa fue quien paró el camión y le dijo al conductor que le prestara el celular para mandarle un mensaje a su mamá a decirle que el autobús se había accidentado. Al momento la mamá envió un mensaje al grupo diciendo lo que había pasado, porque ya estábamos preocupados porque el autobús no daba señales. Solo teníamos que estaba parado en Remedios, pero nadie nos daba respuesta", relató la madre de familia.
Mientras le decía al conductor lo ocurrido, también alcanzó a informar sobre lo que había pasado con varios de sus compañeros, tanto los que estaban bien como los que habían fallecido, informó.
Después de que Rúa Vallejo logró establecer comunicación, los parientes se contactaron con los organismos de socorro, que llegaron hasta este barranco para rescatar a los jóvenes lesionados, al tiempo que los agentes de la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía Antioquia acudieron para hacer la inspección a los cadáveres de los 17 fallecidos, 16 estudiantes y el conductor del autobús.
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Otro relato que se ha conocido es el de joven estudiante Miguel Ángel Carvajal, quien resultó lesionado tras el siniestro. Según su madre, Diana Arroyave, el joven relató que el único que sintieron él y los demás estudiantes fue que el autobús estaba cayendo al vacío, puesto que tanto él como la mayoría de los viajeros se encontraban dormidos al momento del siniestro.
"Estaba medio dormido cuando sintió que cayó y él quedó dentro del autobús. Cuando sintió que entró agua al vehículo, se salió y ahí fue cuando vio a varios de sus compañeros sobre las piedras. Él también logró escalar por sus medios y salir a la parte alta de la vía", relató esta madre, quien estaba acompañando a su hijo en el Hospital San Vicente de Paúl, de Remedios.