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Con la sutileza de un grupo de ladrones de película, tres delincuentes en Apartadó lograron llevarse un botín de $50 millones tras penetrar un local de tecnología y asaltar un cajón donde se hallaba el dinero.
Según las autoridades, los hombres entraron al establecimiento a través de un hueco que abrieron desde una vivienda contigua. Una vez rompieron el muro divisorio ingresaron vestidos de negro y con el rostro tapado con máscaras. Llegaron directo hasta el cajón que, evidentemente, tenían identificado previamente y sacaron los $50 millones. “Según lo que manifiesta el propietario del establecimiento, digamos que no tocaron nada más, no movieron nada si no que llegaron a ese cajón”, relató el mayor Mario Alexander Cárdenas, comandante del distrito 1 de la Policía de Apartadó.
Pero a pesar del sigilo la alarma del local sí sonó. El problema es que los dueños del establecimiento solo se dieron cuenta del robo una hora después y cuando llamaron a la Policía no encontraron sino algunos rastros de los ladrones. Según el mayor Cárdenas, la Sijín logró recabar algunas huellas dactilares que podrían servir para identificar, tras analizarlas en laboratorio, las identidades de los delincuentes.
Los que no fueron nada sutiles fueron dos ladrones que pretendían asaltar una entidad financiera en Turbo con arma de fuego. Ambos fueron capturados gracias a la información ciudadana.