Se le ha dado por sumar cuántas horas al día se la pasa frente a una pantalla. Haga la cuenta, y no solo con la del computador, también la del celular y la del televisor, a lo mejor también tiene tableta y la ha usado bastante en estos dos meses que se completaron de aislamiento y trabajo en casa.
Los especialistas en la salud visual han evidenciado problemas por ello. El optómetra Leonardo Orjuela cuenta que la gente se está quejando de cansancio visual, “asociado al exceso de tiempo pegados de dispositivos y a las multitareas ya que están hasta en dos computadores, el celular y la tableta a la vez”.
Como describe la Asociación Americana de Oftalmología (AAO) , “si pasa horas enteras del día utilizando estos dispositivos digitales, es posible que note que tiene visión borrosa, y que sus ojos están adoloridos y cansados. También que se secan, lloran o arden”.
Kevin Arango Simoni, oftalmólogo y retinólogo de la Clínica Clofán y el Hospital Pablo Tobón Uribe, cuenta que el ojo seco es de las condiciones más frecuentes y eso tiene una explicación más allá del efecto que pueda tener una pantalla. “Cuando las personas están mirando el computador, bastante concentrados y ni siquiera mueven los ojos hacia el teclado, por ejemplo, se genera una fatiga que se da porque parpadea menos. Parpadear es necesario para tener bien lubricada la superficie ocular, si no se genera resequedad que se traduce en irritación ocular, enrojecimiento, sensación de cuerpo extraño (como si tuviera arenita) y ardor”.
Pausas activas
Lo han dicho los fisioterapeutas, los psicólogos y ahora insisten en ello los encargados de la salud visual. “Así como el cuerpo necesita cambio de actividad, los ojos también. Las pausas activas ayudan a que se repongan y no entren en un sufrimiento a nivel de la superficie ocular”, indica Orjuela.
Arango detalla que hay que parar un momento, mirar hacia otro lado, levantarse a hacer un café, ir a mirar al horizonte, cerrar los ojos para que el parpadeo normal vuelva a restablecerse”.
Muchos pacientes –indica Arango– ya tienen una condición previa de ojo seco, y debe seguir el tratamiento adecuado que su oftalmólogo le haya recomendado. Si nunca ha presentado esta condición, antes de comprar cualquier tipo de gotas lubricantes es mejor que consulte a su médico.
Sobre la luz de las pantallas, cuenta el oftalmólogo, que incomodan sobre todo a quienes sufren de fotofobia, que es la intolerancia a la luz, “por fortuna los monitores actuales, celulares y televisores tienen la capacidad de cuadrar ese brillo y esa luz y se hace manejable para buscar una imagen cómoda al ojo”.
Cuidado con la posición
Otro llamado de atención es que las personas cuando trabajan con el computador no se dan cuenta de su posición física, y “muchas veces estamos con la pantalla muy alta, muy baja, detrás hay una ventana que genera reflejo, cosas en las que uno no cae en cuenta, pero que al final del día reflejan cansancio ocular”, precisa Arango. Orjuela añade que un espacio ergonómico para trabajar no es solo importante para la espalda y el cuello, también lo es para sus ojos.
Otro punto que destacan ambos profesionales es que si una persona tiene ya condiciones como miopía, hipermetropía o astigmatismo y debe usar gafas, lo haga. “Eso sí, si alguien nunca las ha necesitado y tiene una visión 20/20 no tiene que usarlas, ni siquiera las que llaman de descanso porque eso no le va a generar menos fatiga o va a impedir que se canse ni mucho menos le evitará algún problema visual. En eso no he estado de acuerdo. En cambio, si usted necesita gafas para algo y no las usa, lo primero que va a pasar es que no va a ver bien y el defecto probablemente se le va a descompensar más”, concluye el oftalmólogo.
No los descuide.
15
veces por minuto parpadea una persona según la AAO. Baja de 5 a 7 veces al mirar cualquier tipo de pantalla.