La certificación del Departamento de Estado es un reconocimiento a la firmeza de la política del presidente Duque contra el narcotráfico, la cual logró erradicar, manualmente, 130.000 hectáreas de coca y destruir más de 5.000 laboratorios el año pasado.
Hay que avanzar en la interdicción área nacional e internacional y el lavado de activos. Este proceso y la política antidrogas no afectan el Acuerdo de paz (...) La misma establece que también deben usarse otros mecanismos como la aspersión aérea con precisión, tal como lo determina la Corte Constitucional.
El gobierno Duque además trabaja en el programas de sustitución de cultivos con más de cien mil familias beneficiarias, impulsando cultivos como cacao, café especial y otros productos.
La certificación otorgada por el secretario de Estado, Antony Blinken, ratifica el compromiso indeclinable que tiene el país en su lucha contra el narcotráfico. El apoyo del gobierno de EE.UU a Colombia sigue vigente y está fortaleciéndose en pro de liberar al país del flagelo.
Aquí no habrá tregua para luchar contra el narcotráfico y, sobre todo, con los cultivos ilícitos, que alimentan la violencia de estos grupos narcocriminales, que tanto afectan las regiones colombianas
