Insistimos en que se recupere la visión integral de la salud pública. Los datos dejan claro que, aunque estemos en pandemia, no debemos descuidar las otras causas de muerte. Otros determinantes sociales de la salud, como la educación y el empleo, tampoco deben ser subestimados, pues son cruciales para la expectativa y calidad de vida de varias generaciones. Consideramos necesario que, en coherencia con la resolución 777 de 2021, la reapertura de todos los sectores sociales, educativos y económicos debe proseguir con agilidad en todo el territorio nacional.
Si bien el avance del Plan Nacional de Vacunación (PNV) ha sido notable en lo corrido de este mes, es importante que se estabilice un ritmo de vacunación superior a las 300.000 dosis diarias. En el panorama actual, ese nivel de aplicación es una excepción y no la regla. Se deben concentrar todos los esfuerzos en mantener cifras de vacunación diaria altas y en cerrar las brechas que se observan en el territorio nacional en términos de aplicación. Del éxito y avance del PNV depende el retorno completo de las actividades económicas, la puesta en marcha de los comercios y de la vida social como la conocíamos antes. En suma, el bienestar de los colombianos
